La reina Letizia de España apareció en el Teatro Real de Madrid, vestida con un pantalón blanco, una americana fucsia y, sorprendentemente, deportivas blancas. La razón de este calzado poco convencional en un evento tan formal se debe a una lesión que la reina ha sufrido recientemente. La soberana presidió el concierto “EmociónArte” este jueves por la mañana, un evento organizado por la Fundación Princesa de Girona, que tiene como objetivo fomentar la educación en bienestar emocional.
Según fuentes cercanas, la Reina Letizia se ha visto obligada a utilizar este tipo de calzado debido a una fractura en la falange proximal del dedo central del pie derecho. Esta lesión requiere el uso de una sindalicta terapéutica, una sujeción de dos dedos contiguos, para facilitar la inmovilización de la falange. Esto, junto con un tratamiento a base de hielo y analgésicos, ha llevado a la reina a tener que llevar zapatillas deportivas hasta que se recupere.
Aunque visiblemente adolorida, la Reina llegó al Teatro Real alrededor de las diez y media de la mañana. Allí, compartió que no tenía idea de lo que le había ocurrido hasta que se le realizaron varias pruebas médicas. «Una mala suerte, pero esto se cura. No sabía lo que me pasaba hasta que me hicieron la radiografía», comentó Doña Letizia.
La lesión se produjo hace varios días durante un accidente doméstico, cuando la Reina se golpeó el pie contra una mesa. No se supo de la gravedad de la lesión hasta después del evento en Zaragoza el pasado sábado, al que asistió con fuertes dolores en el pie derecho y llevaba unos zapatos de tacón bajo.
A pesar de la recomendación médica de aplicar hielo y descansar, la reina ha decidido mantener su agenda de actividades. Desde la Casa del Rey, explicaron que «Su voluntad es mantener la agenda prevista de actividades, aunque deberá hacerlo con ese calzado diferente al habitual, incluso en actos oficiales o de gala, durante el tiempo necesario».
La recuperación de la Reina de esta lesión durará todavía algunas semanas, hasta «la consolidación de la falange fracturada». Mientras tanto, la Reina Letizia seguirá cumpliendo con sus deberes oficiales, aunque con un cambio notable en su vestimenta: sus habituales tacones serán reemplazados por zapatillas deportivas. Aunque esto pueda parecer un detalle menor, es un recordatorio de que incluso las figuras más altas de la sociedad no son inmunes a los accidentes cotidianos.