Tadej Pogacar se prepara para descender este sábado a la impresionante tierra de Siena. En medio de los caminos blancos que serpentean a través de los paisajes más pintorescos de la Toscana, Pogacar apretará un botón en su cronómetro particular para dar inicio a su temporada 2024. El ciclista esloveno tiene grandes expectativas para este año, con la victoria en el Giro y el Tour como sus principales objetivos. Esta es la primera vez en la historia del deporte que el Tour finalizará en Niza, en vez de en París, debido a la proximidad de los Juegos Olímpicos.
Sin embargo, para lograr su ambición, Pogacar tendrá que lidiar con la competencia de Jonas Vingegaard, otra estrella en ascenso en el mundo del ciclismo. El esloveno tiene el honor de abrir la temporada con la carrera Strade Bianche, que también marca el inicio de las grandes clásicas. A pesar de su importancia, la Strade Bianche todavía se encuentra un escalón por debajo de otras carreras de renombre como la de Flandes, Roubaix y Lieja.
El fenómeno esloveno inaugurará un mes de marzo estelar lleno de carreras tanto de un día como de una semana. El domingo da inicio la París-Niza y el lunes la Tirreno-Adriático, dos rondas por etapas que, inexplicablemente, coinciden en el calendario.
El mes de marzo promete ser espectacular, comenzando con la carrera de ‘sterrato’ o gravel en Italia este sábado y culminando con el Tour de Flandes el domingo de Pascua, día 31, donde se espera un nuevo duelo entre Mathieu van der Poel y Wout van Aert.
Este mes será el momento de evaluar el nivel de forma de todas las estrellas del firmamento ciclista. Vingegaard ya ha demostrado su fuerza la semana pasada en Galicia, en el O Gran Camiño, de la misma manera que Remco Evenepoel lo hizo en febrero y en el Algarve. Aún está por ver cómo se comportarán las dos estrellas eslovenas, Pogacar y su compatriota Primoz Roglic, quien debuta este domingo en la Strade Bianche como líder del equipo Bora tras abandonar el Jumbo, que esta temporada pasa a llamarse Visma.
El mes de marzo también verá la celebración de la Milán-San Remo el sábado 16, y la Volta, entre el 18 y el domingo 24. Este año, la presencia de Pogacar como principal favorito a la victoria ha aumentado la importancia de la Volta. La París-Niza verá el primer duelo del año entre Roglic y Evenepoel, mientras que la Tirreno, desde el lunes y hasta el domingo día 10, será el escenario para ver si Vingegaard sigue manteniendo su voraz apetito de victoria.
En cuanto a los ciclistas españoles, Carlos Rodríguez se enfrentará a la ruta entre París y Niza. A pesar de haberse mostrado algo verde en Galicia, Rodríguez tiene la esperanza de tener un buen rendimiento. Por otro lado, Oier Lazkano, que se espera sea la referencia local en las clásicas, ha tenido que retirarse de la ‘carrera del sol’ debido a una gripe.
Finalmente, la Tirreno será el debut de Enric Mas tras convertirse recientemente en padre. Allí se unirá a Juan Ayuso para tratar de rodar lo más cerca posible de un Vingegaard intratable. Luego llegará abril, pero aún queda tiempo para disfrutar de un mes de marzo repleto de clásicas.
