Expectativas y Desengaños: Francia y Países Bajos empatan en la Eurocopa
La Eurocopa está demostrando que vivir en la expectativa puede llevar irremediablemente al desengaño. En un torneo en el que la España de De la Fuente pasó de ser sospechosa en el prólogo para amontonar elogios tras las dos primeras curvas, uno de los partidos más llamativos de esta primera fase fue el que enfrentó a Países Bajos y Francia en Leipzig.
Mbappé en el banquillo y la controversia del VAR
Y ni siquiera la suplencia de Kylian Mbappé, al que no le hizo falta ajustarse la máscara que le resguardara su fracturada nariz, explicó que el combinado francés continuara provocando dudas. De hecho, Francia esquivó una situación comprometida cuando el árbitro y el VAR negaron a Xavi Simons el 1-0 a 20 minutos del final.
Todos los ojos estaban puestos en el polémico incidente de VAR. Dumfries, en posición de fuera de juego, estaba junto a Maignan cuando la pelota alcanzaba la meta, lo que fue suficiente para que los jueces interpretaran que incomodaba a un portero ya superado.
Los entrenadores y su influencia en el juego
Las precauciones tomadas por los entrenadores jugaron un papel importante en el desarrollo del espectáculo, que se parecía más a una faena burocrática en la que las dos selecciones buscaban la mejor manera de no dañarse.
Didier Deschamps, fiel a sus ideales, decidió que el lugar en el once que dejaba libre Mbappé debía ser para el mediocentro Tchouaméni, que no jugaba por lesión desde el pasado 8 de mayo. De este modo, estableció un centro del campo sostenido por Kanté, y en el que Rabiot debía asumir tareas ofensivas desde la banda izquierda.
El papel de los seleccionados de Países Bajos
Por su parte, la selección de Ronald Koeman tuvo que esforzarse por mostrarse competitiva pese al escaso nivel ofensivo que presenta, que contrasta con una pareja de centrales de postín, la formada por Van Dijk y De Vrij.
Xavi Simons corría mucho por la mediapunta sin que ningún compañero le mirara. Y cuando tocaba alguna pelota, le faltaba algo de paciencia en las decisiones. Más ducho estaba Reijnders, aunque quien podía ofrecer el peligro real era Gakpo, aunque sólo se escapó una vez de Koundé. Mientras tanto, Memphis parecía más preocupado en que su diadema blanca no se moviera de la frente que en servir pelotas a balón parado que nadie remataba.
Los porteros como figuras clave
Los porteros también tuvieron su parte de protagonismo en el partido. Maignan le negó un gol a Frimpong en el mismo amanecer después de que el carrilero le ganara la espalda a Theo Hernández. Y el portero del Milan repetiría manotazo con un buen disparo de Gakpo desde el vértice.
Por otro lado, no se quedó atrás el joven Verbruggen, guardameta del Brighton de 21 años que se gustó de lo lindo a remates de un Griezmann que continúa con su mala racha con los ‘bleus’ (ha marcado sólo tres goles en sus últimos 31 partidos con Francia).
El camino hacia la siguiente ronda
A pesar de todo, Países Bajos y Francia suman cuatro puntos y ya pueden mirar a la siguiente ronda. Otra cosa es el cuerpo que le quedó a unos espectadores que, claro, esperaban otra cosa. Como en cualquier torneo de alta competición, las expectativas siempre son altas y el desengaño puede estar a la vuelta de la esquina. Pero eso es también parte de la emoción y la pasión del fútbol.