En una noche de alta cocina y drama televisivo, los aspirantes y ex-aspirantes a ser los mejores chefs de España se pusieron a prueba en la imponente Catedral de San Salvador de Oviedo, orgullosa Capital Española de la Gastronomía 2024. Este escenario monumental sirvió de fondo para un desafío de cocina en el que el prestigioso chef Nacho Manzano, galardonado con tres Soles Repsol, puso a prueba las habilidades culinarias de los concursantes.
La presión era alta, no solo se trataba de evitar la eliminación, sino también de la posibilidad de que uno de los participantes ya expulsados volviera a las cocinas con todos los derechos de un concursante. En una sorprendente vuelta de tuerca, el concursante David, un legionario terraplanista que ha sido el centro de muchas conversaciones, fue el ganador de esta segunda oportunidad en el concurso de cocina más famoso de la televisión española, ‘Masterchef’.
Antes de este emocionante desenlace, los aspirantes tuvieron que enfrentarse al primer desafío de la noche: preparar un plato libre lleno de fitoquímicos. Se les pidió que crearan un plato cuyos protagonistas fueran frutas, verduras, cereales, legumbres y frutos secos, todos ellos ingredientes conocidos por su alto contenido en compuestos bioactivos fundamentales para la salud y para prevenir muchas enfermedades.
Entre todas las creaciones, la que más destacó fue la de Ángela, que presentó una versión sencilla y deliciosa del gazpacho de cerezas. Sin embargo, la noche no fue tan positiva para todos los concursantes. Gonzalo, uno de los participantes, recibió el castigo más temido del programa: un delantal negro. Esto se debió a que colocó el cilantro en su plato fuera de tiempo, a pesar de que su plato fue reconocido como el segundo mejor de la prueba.
Sin embargo, este castigo desató una ola de acusaciones de favoritismo por parte de la audiencia, especialmente en lo que respecta al trato recibido por Samya. La joyera no solo presentó una elaboración calificada de mediocre, sino que además decidió no utilizar un electrodoméstico que el programa había marcado como obligatorio para hacer la receta.
Las redes sociales estallaron en críticas hacia la decisión tomada por los jueces Pepe, Samantha y Jordi, quienes fueron acusados de tratar de manera especial a la concursante hispano-marroquí. Muchos espectadores llegaron a compararla con Luca Dazi, un concursante de la 12ª edición del programa que también fue acusado de recibir un trato preferencial por parte del jurado. Una vez más, la sombra del favoritismo vuelve a sobrevolar en ‘Masterchef’.
Gonzalo, por su parte, expresó su frustración con la situación y acusó al jurado de ser demasiado duro con él. «Estoy muy mosqueado con el delantal negro. Creo que soy al que más caña le dan, con muchísima diferencia. No me quito la culpa que tenga, pero son durísimos conmigo. Estoy muy, muy chinado», afirmó.
En medio de esta controversia, una cosa es segura: la competencia en ‘Masterchef’ se está calentando y la tensión entre los concursantes está en su punto más alto. Con los desafíos cada vez más difíciles y las emociones a flor de piel, la lucha por ser el mejor chef de España promete ser más emocionante que nunca.