El sábado se prevé un día bastante emocionante, ya que el Athletic Club se enfrenta al Mallorca en una competición por la Copa del Rey que no ha levantado en 40 años. Este enfrentamiento entre vascos y baleares se celebrará en el estadio de La Cartuja a las 22.00 horas. El Mallorca, por su parte, espera poder recrear la victoria que logró en 2003 contra el Recreativo de Huelva, que fue su única Copa del Rey hasta la fecha.
Los aficionados del Athletic Club esperan con ansias la oportunidad de desempolvar la Gabarra, la embarcación con la que se celebra los títulos en el río Nervión. Esta embarcación ha estado inactiva desde 1984, cuando se utilizó para celebrar la victoria de la Copa del Rey. Sin embargo, ha necesitado un costoso mantenimiento valorado en 20.000 euros para volver a ser operativa.
En la víspera de este importante partido, los miembros del club de remo Bilboko Arraunlari Beteranoak han navegado por el río Guadalquivir en una trainera, una embarcación más pequeña que acompaña a la Gabarra, para añadir un poco más de color a la capital hispalense. Los 17 remeros veteranos de este club de remo comenzaron su travesía desde el embarcadero del Centro de Alto Rendimiento de La Cartuja y llegaron hasta el puente de Triana, donde fueron recibidos por miembros de Kutxabank y Metro de Bilbao disfrazados de leones.
Además de colonizar el río Guadalquivir, la afición bilbaína también ha tomado la ciudad de Sevilla, que se espera que reciba a un total de 100.000 visitantes con motivo de la final de la Copa del Rey 2024. Los hoteles han colgado el cartel de ‘completos’ y prácticamente todos los bares y restaurantes de la ciudad han sido tomados por vascos y mallorquines.
Esta final de la Copa del Rey no es solo un evento deportivo, sino una gran celebración que reúne a multitudes de diferentes regiones de España. Las calles de Sevilla se llenarán de aficionados del Athletic Club y del Mallorca, todos esperando que su equipo levante la codiciada Copa.
La trainera, que ha viajado hasta Sevilla para esta ocasión, es un símbolo de la pasión y el orgullo que los vascos sienten por su equipo. El hecho de que esta embarcación esté presente en Sevilla es un testimonio de la increíble dedicación de estos aficionados. Es esta pasión la que hace que el fútbol sea más que solo un juego.
El sábado por la noche, los ojos de toda España estarán puestos en el estadio de La Cartuja. El Athletic Club y el Mallorca se enfrentarán en un partido que promete ser emocionante. Y aunque solo un equipo puede llevarse la Copa del Rey, el espíritu deportivo y la pasión que ambas aficiones han demostrado ya han hecho de esta una victoria para el fútbol español.
Esperemos que esta final de la Copa del Rey sea una celebración del fútbol, independientemente del resultado. Que sea una noche llena de emoción, pasión y, sobre todo, respeto. Que el mejor equipo gane, pero que todos los aficionados disfruten del juego y del espectáculo. Porque al final del día, eso es lo que verdaderamente importa.