Un viaje de ensueño a México se convirtió rápidamente en una pesadilla para tres amigos treintañeros, dos australianos y un estadounidense. Callum, Jake y Jack, los tres amigos, estaban disfrutando de las playas paradisíacas de Ensenada, en el estado mexicano de Baja California, cuando su viaje dio un giro trágico. Sus viajes de surf y cervezas en la playa, documentados en las redes sociales, terminaron abruptamente con un intento de robo de vehículos que desencadenó una serie de eventos fatales.
El mundo se conmocionó cuando los cuerpos de los tres turistas fueron descubiertos. «Creo que el corazón de todo el país está con todos sus seres queridos», dijo el tesorero del Gobierno australiano, Jim Chalmers, en una rueda de prensa. La situación, aunque espantosa, es desafortunadamente común en México, aunque rara vez recibe atención internacional a menos que involucre a extranjeros.
Los hermanos australianos Jake y Callum Robinson habían viajado a México junto a su amigo estadounidense Jack Carter. Sus publicaciones en redes sociales pintaban el retrato de un viaje de ensueño, con imágenes de furgonetas en la playa, tablas de surf y paisajes impresionantes. Sin embargo, la última foto que enviaron de su viaje fue de la playa, sin saber que sería la última.
El 27 de abril, un día después de su primera publicación, los tres amigos debían llegar a un alojamiento que habían reservado en Rosarito, Baja California, pero nunca llegaron. Después de 24 horas sin noticias de ellos, se informó de su desaparición. La última vez que se les vio fue en Santo Tomás, a unos 100 kilómetros de su destino previsto.
«Mis amigos australianos Jake y Callum han desaparecido en Rosarito/Ensenada, en Baja California este sábado por la mañana», advirtió un amigo de los hermanos en las redes sociales. Jake, el menor de los dos hermanos y médico en Australia, había viajado para visitar a Callum, un jugador de lacrosse en EE.UU., antes de dirigirse a México. La madre de los australianos, Debra Robinson, también hizo un llamamiento desesperado en Facebook para encontrar a sus hijos, destacando que el mayor de ellos es diabético.
Mientras los jóvenes seguían desaparecidos, empezaron a surgir pistas que conducían a un final trágico. Entre ellas se encontraba la aparición de la furgoneta en la que viajaban, así como restos quemados de tiendas de campaña con manchas de sangre en La Bocana de Santo Tomás, una zona sin cobertura. Los cuerpos de los tres amigos fueron encontrados un día después.
El 3 de mayo, se recuperaron tres cadáveres en un pozo de un acantilado. Según las investigaciones, los tres jóvenes fueron asesinados durante un intento de resistirse al robo de sus furgonetas. «Los cuerpos presentaban en sus cabezas un orificio producido por proyectil de arma de fuego», indicó la fiscal estatal, María Elena Andrade.
Las autoridades han informado de la detención de un hombre con antecedentes de violencia, robos y venta de drogas en relación con los hechos. Asimismo, otras dos personas, una de ellas mujer, también han sido detenidas por su probable participación en el crimen y por posesión de metanfetaminas.