Un relato de sangre y miedo: el hombre acusado de asesinato en la calle Platero de Bares
El pasado 11 de abril, un crimen violento que conmocionó la ciudad de Bares tuvo lugar en la calle Platero. Un hombre de nacionalidad rumana, con pasado criminal y una orden de alejamiento de su ex pareja, es acusado de haber degollado a un hombre de 47 años tras una noche de fiesta llena de alcohol y drogas. El acusado ha admitido ante el juez que fue él quien asestó la puñalada en el cuello a la víctima, pero afirma que fue en defensa propia durante una pelea con los otros dos.
El acusado, que ya había sido condenado anteriormente por un delito de Violencia sobre la Mujer, se encontraba en la casa con su ex pareja a pesar de que pesaba sobre él una orden de alejamiento. Según fuentes judiciales consultadas por ABC, el hombre había sido acogido en la casa por la mujer que residía allí, después de que él saliera de prisión y la amenazara si no lo hacía.
La mujer, que ha prestado declaración en la sala 15 de la Ciudad de la Justicia, ha explicado al juez que la noche de la tragedia, el acusado había pasado la noche de fiesta con su ex pareja y un amigo. Asegura que a primera hora de la mañana, el acusado salió del piso y regresó con un cuchillo, sin que hubiera una pelea previa.
Contradicciones en las declaraciones
Esta versión de los hechos contrasta con la del acusado, que sostiene que todo ocurrió dentro del piso y que la puñalada fue un accidente al intentar defenderse con el cuchillo que habían utilizado para cortar la droga. Según su relato, habían comprado medio gramo de cocaína y otras sustancias esa noche.
El acusado ha afirmado que no pudo ver bien dónde asestó la puñalada porque estaba siendo agarrado durante la pelea. Además, asegura que le pusieron una chaqueta en la cabeza, limitando su visión. Esta afirmación, sin embargo, no concuerda con la declaración de la testigo presencial.
Según fuentes judiciales consultadas por ABC, la víctima, de 47 años, murió desangrada en el rellano de la escalera después de recibir dos puñaladas, una de las cuales le cortó una arteria carótida en el cuello. Tras usar el cuchillo, se alega que el presunto autor de la puñalada mortal lanzó el cuchillo a su ex pareja mientras la víctima huía por las escaleras, aunque ella no resultó herida.
Ahora, la justicia deberá decidir si la versión del acusado, que sostiene que actuó en defensa propia durante una pelea, es creíble. Por el momento, el acusado permanece en prisión provisional a la espera de que se desarrolle el juicio. Mientras tanto, los residentes de la calle Platero y de la ciudad de Bares en general, se enfrentan a la realidad de este crimen violento y a las preguntas sobre cómo pudo suceder.
Este caso destaca la importancia de la implementación de medidas eficaces para prevenir la violencia de género y proteger a las víctimas. También pone de manifiesto la necesidad de abordar el problema del abuso de sustancias y su vínculo con la violencia. A medida que el juicio avanza, la sociedad espera que se haga justicia y que se tomen medidas para prevenir que tales tragedias vuelvan a ocurrir.