Los aviones generan fuertes emisiones de efecto invernadero

La industria de la aviación, un pilar importante para la economía global, se encuentra en un dilema. El cambio climático amenaza con derrumbar sus cimientos, a menos que se implementen mejoras técnicas urgentes para reducir su insostenible ritmo de emisiones. Según un informe reciente de la Agencia Europea de Seguridad Aérea (EASA), la aviación es responsable del 3,6% de las emisiones de gases de efecto invernadero en los países de la Unión Europea. A nivel mundial, la cifra es del 2,5%, según la Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA).

Aunque estos porcentajes pueden no parecer alarmantes a primera vista, hay que tener en cuenta que si otros sectores industriales logran recortar sus niveles de emisiones y la aviación no implementa mejoras significativas, la contribución de este sector al total global de emisiones aumentará. Por lo tanto, es crucial que se tomen medidas para reducir las emisiones de la aviación.

Para lograr esto, los expertos señalan varias áreas clave en las que la industria debería centrar sus esfuerzos: la mejora de los aviones, la adaptación de las infraestructuras y las operaciones aéreas, las medidas de mercado y, sobre todo, la adopción de combustibles sostenibles. Esta última es