Tras casi medio año de espera desde que fue investido presidente de la Xunta con su primera mayoría absoluta, Alfonso Rueda mantiene este viernes en La Moncloa una reunión con el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez. Es su segundo encuentro, tras el celebrado en 2022, cuando el anterior mandatario gallego, Alberto Núñez Feijóo, dio el salto a la política nacional. En la cita, prevista para las 12:30 horas, el titular del Ejecutivo gallego abordará cuestiones que considera prioritarias para la Comunidad, como la necesidad de negociar una reforma de la financiación autonómica de forma multilateral, el apoyo a proyectos industriales con los fondos europeos, que siguen sin movilizarse, y algunas asignaturas pendientes del Gobierno central con los gallegos y gallegas, como la transferencia de las competencias del litoral, el traspaso y la gratuidad de la AP-9 o la salida sur de Vigo. Muchas de ellas, ya tratadas en la reunión de hace dos años.
Pese a convocarlo con una semana de antelación y tener que cancelar un viaje institucional a Brasil por coincidencia de fechas, Rueda defendió en todo momento que se trata de una cita «prioritaria» por la que, además, lleva esperando más de cinco meses. En ese tiempo, Sánchez sí se reunió con el Lehendakari y con el presidente de la Generalitat de Cataluña, a pesar de que tomaron posesión de sus cargos más tarde que su homólogo gallego. El portavoz del Grupo Popular, Alberto Pazos, calificó esto como una muestra del «menosprecio» del Gobierno central a Galicia y a los gallegos. No obstante, Sánchez finalmente recibe este viernes a Rueda a las 12:30 horas en el palacio de La Moncloa, después de reunirse con el presidente vasco a las 10. Más tarde, respetando el orden estatutario, se reunirá con el presidente andaluz, Juanma Moreno.
Temas a tratar en la reunión
La propuesta de temas a tratar en el encuentro no contiene sorpresas, y todos son asuntos «conocidos», como aseguró Rueda este lunes. La necesidad de reformar el sistema de financiación autonómica es el primer punto del orden del día. Como ya ha reiterado en numerosas ocasiones, el presidente de la Xunta no tiene intención de negociar de forma bilateral la financiación de Galicia. De hecho, está previsto que inste al presidente a convocar la Conferencia de Presidentes, ya que considera que debe abordarse de forma multilateral con todos los líderes autonómicos.
Esta decisión le ha valido numerosas críticas por parte de la oposición, tanto de nacionalistas como de socialistas. «Servilismo a Génova» y «defender los intereses del PP» frente a los de los gallegos fueron las ideas más repetidas, acusando al mandatario de una suerte de egoísmo con su comunidad en favor de su partido por, entre otras cuestiones, su disposición a rechazar una condonación de la deuda si se la propusieran. Una solución del «independentismo catalán» que al Ejecutivo gallego no le encaja, como indicaron fuentes de presidente consultadas por este medio, y que no resolvería el déficit de 600 millones de euros que tiene al año la Comunidad debido al actual sistema de financiación. «Tenemos otros problemas de inversión más acuciantes, como, por ejemplo, que se reconozca adecuadamente en el nuevo modelo el peso del envejecimiento de la población y su dispersión» en el coste de los servicios, explican las mismas fuentes.
La segunda cuestión que Rueda va a plantear al presidente del Gobierno será el estado de las infraestructuras en lo que concierne a las autovías y las conexiones ferroviarias. La salida sur de Vigo, la alta velocidad con Portugal, el traspaso y la gratuidad de la AP-9, el impulso al corredor atlántico del noroeste o la planificación eléctrica entre ellas. Además, abordará el impulso a los proyectos industriales, como el de Altri, centrándose sobre todo en los fondos europeos, que siguen sin movilizarse; así como la transferencia de las competencias de gestión del litoral y otros temas prioritarios para Galicia, como la sanidad pública, el sistema de dependencia, la política de vivienda, el impulso a los sectores primarios o el Xacobeo 2027.
Muchas de estas cuestiones están pendientes desde la reunión de hace dos años. Estos «pobres resultados» hacen que esta vez el partido muestre su «escepticismo» y «pesimismo» respecto a las expectativas, como auguró el portavoz del Grupo Popular, Alberto Pazos, esta semana. Más dura en sus críticas fue la secretaria xeral de los populares gallegos, Paula Prado, quien este jueves afeó que «son tantos los desprecios y los incumplimientos de Sánchez con Galicia que el presidente Rueda va a tener que hacer un esfuerzo de comprensión para poder resumírselos al presidente del Gobierno y aún así no le llegaría todo el viernes».
Fuente de la información: ABC