Las concentraciones de gases de efecto invernadero, la temperatura global en la Tierra y de los océanos, el nivel global del mar y el contenido de calor del océano alcanzaron máximos históricos en 2023, según el 34 Informe Anual sobre el Estado del Clima, que acaba de hacerse público. El estudio confirma que 2023 fue el peor en términos climáticos de la historia de la humanidad, al menos desde que hay registros.
Un año de récords alarmantes
El informe, elaborado por la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica (NOAA) de Estados Unidos, ha puesto de manifiesto que los niveles de dióxido de carbono (CO2) y otros gases de efecto invernadero han alcanzado cifras sin precedentes. En 2023, la concentración de CO2 superó las 420 partes por millón (ppm), un récord histórico que no se había visto en millones de años. Este incremento está directamente relacionado con la quema de combustibles fósiles y la deforestación a gran escala.
La temperatura global también ha alcanzado cifras preocupantes. En 2023, la temperatura media del planeta se situó en 1,2 grados Celsius por encima de los niveles preindustriales, acercándose peligrosamente al límite de 1,5 grados establecido por el Acuerdo de París. Esta subida de temperatura ha tenido consecuencias devastadoras, como el aumento de fenómenos meteorológicos extremos, incluyendo olas de calor, incendios forestales e inundaciones.
El nivel del mar ha seguido su tendencia ascendente, alcanzando un nuevo máximo en 2023. Según el informe, el nivel global del mar ha subido 3,6 milímetros respecto al año anterior. Este aumento se debe principalmente al derretimiento de los glaciares y al calentamiento de los océanos, que provoca la expansión térmica del agua. El contenido de calor del océano también ha alcanzado niveles récord, lo que tiene un impacto directo en la vida marina y en la biodiversidad.
La situación es especialmente grave en el Ártico, donde las temperaturas están aumentando al doble de la tasa global. El deshielo del permafrost y la reducción de la capa de hielo marino están acelerando el cambio climático, liberando grandes cantidades de metano, un gas de efecto invernadero mucho más potente que el CO2.
Impacto en la salud y la economía
El cambio climático no solo está afectando al medio ambiente, sino que también tiene graves repercusiones en la salud y la economía mundial. El aumento de las temperaturas y la contaminación del aire están relacionados con un incremento en las enfermedades respiratorias y cardiovasculares. Además, los fenómenos meteorológicos extremos están causando pérdidas económicas multimillonarias y desplazamientos masivos de población.
El informe subraya la necesidad urgente de tomar medidas radicales para mitigar el cambio climático. Esto incluye una reducción drástica de las emisiones de gases de efecto invernadero, una transición hacia energías renovables y la protección de los ecosistemas naturales. Sin embargo, los avances en este sentido han sido insuficientes, y el tiempo se está agotando.
En este contexto, es crucial que los gobiernos, las empresas y la sociedad civil trabajen juntos para abordar esta crisis global. La implementación de políticas de descarbonización, la promoción de la economía circular y el fomento de la educación ambiental son pasos esenciales para garantizar un futuro sostenible.
El 34 Informe Anual sobre el Estado del Clima es un llamado de atención para la humanidad. Nos encontramos en un momento crítico y las decisiones que tomemos ahora determinarán el futuro de nuestro planeta. ¿Estamos preparados para enfrentar este desafío y tomar las acciones necesarias para proteger nuestro hogar común?