Las acciones de la cadena de enormes guardes Macy’s han registrado un principio de semana convulso, con una caída del 7,68% en la sesión de este lunes de Wall Street, una vez que la compañía haya reconocido la presencia de «pausas mucho más pronunciadas de lo pensado» en la campaña navideña y pronosticara adversidades para el año que empieza similares con la aptitud de gasto de los usuarios.
La firma presentó este viernes las estimaciones para el cuarto período de tres meses de su año fiscal 2022, para el que en este momento aguardan que «las ventas netas estén en el radical inferior al punto medio del rango emitido previamente de 8.161 a 8.401 millones de dólares estadounidenses, al paso que se estima que las ganancias por acción diluidas ajustadas estén en el rango emitido previamente de 1,47 a 1,67 dólares americanos».
«Nuestros equipos se desempeñaron bien a lo largo de una temporada festiva competitiva. En un ambiente en el que el gasto discrecional se encontraba bajo presión, operamos con precisión y agilidad. Las ventas del Black Friday y Cyber Monday estuvieron on-line con nuestras esperanzas, al paso que la semana previo hasta y tras la Navidad estaban por enfrente. No obstante, las pausas de las semanas de vacaciones no pico fueron mucho más profundas de lo sosprechado”, ha asegurado Jeff Gennette, presidente y directivo ejecutivo de Macy’s.
Genette ha añadido que, «basado en los indicadores macroeconómicos recientes y datos de tarjetas de crédito patentados», desde la compañía estiman que «el cliente proseguirá bajo presión en 2023, especialmente en la primera mitad«, con lo que han planeado «la combinación de inventario y la hondura de las compras iniciales consecuentemente».
«Adoptamos un enfoque equilibrado para los recibos de mercancías y proseguimos en compromiso a sugerir moda y valor en todas y cada una de las fabricantes y canales, con la aptitud de cambiar las compras en temporada y perseguir áreas de fortaleza», ha señalado.