El martes pasado, alrededor de medio centenar de agricultores y ganaderos catalanes se reunieron para protestar y presionar a los diputados antes del inicio del pleno monográfico que la Cámara catalana dedica al sector agrario. La manifestación se llevó a cabo en el emblemático pueblo de Pontós (Alt Empordà), un lugar que se ha convertido en un punto central en las protestas de los agricultores catalanes. La protesta fue presidida por una gran rama de pino y una señal de tráfico que apuntaba hacia el pueblo.
Los manifestantes, quienes desplegaron pancartas y carteles de la Unió de Pagesos y de la Plataforma Pagesa, exigieron que se aprueben las medidas efectivas para superar la crisis del sector agrario. Entre las medidas solicitadas se incluyen las ayudas por la sequía y la agilización de los trámites que los agricultores deben realizar a diario.
La protesta, según un participante, es un «aviso de que no se han terminado aún las movilizaciones». La manifestación comenzó casi al mismo tiempo que la portavoz del Govern, Patrícia Plaja, anunciaba que la Generalitat ya ha ejecutado o garantizado un 64% de los acuerdos suscritos con el sector agrario el pasado 14 de febrero. Plaja también mencionó el acuerdo para diseñar cómo se distribuirán las ayudas por la sequía correspondientes a 2024 y concretar cómo se van a indemnizar las pérdidas a los productores que han sufrido restricciones de agua, en algunos casos de hasta el 80%.
Uno de los puntos de discusión en el pleno del martes fue una propuesta de resolución para cambiar el nombre de la Conselleria d’Acció Climàtica, Alimentació i Agenda Rural para incluir alguna referencia a la agricultura o la ‘pagesia’. El president Pere Aragonès adelantó que se incorporará la denominación de Agricultura, Ramaderia i Pesca al ámbito del departamento, en reconocimiento de la importancia de la agricultura.
A pesar de que hasta ahora no figuraba esa mención en el nombre de la conselleria, Aragonès defendió que «a la práctica, ya se está haciendo todo lo que hace un Departamento de Agricultura, Ramaderia i Pesca».
Además, en la reunión que mantuvieron representantes del sector primario con el conseller David Mascort el pasado jueves, se acordó que las cuatro organizaciones participantes (Unió de Pagesos, Joves Agricultors i Ramaders de Catalunya, la Federació de Cooperatives Agràries de Catalunya y la plataforma Revolta Pagesa) tuvieran la posibilidad de intervenir directamente ante el plenario para hacer llegar a los diputados sus reclamaciones.
En esta reunión también se acordó crear una mesa de trabajo que se reunirá de manera permanente y en la que estarán presentes todas las organizaciones que representan al sector. Además, se acordó complementar las subvenciones ya en marcha para los cultivos de herbáceos.
Este encuentro y las acciones posteriores son un reflejo de la constante lucha y esfuerzo por parte del sector agrario para mejorar las condiciones de trabajo y vida de los agricultores y ganaderos catalanes. Sin embargo, las movilizaciones y protestas de estos grupos indican que todavía queda un largo camino por recorrer para alcanzar sus objetivos y demandas. Los agricultores y ganaderos catalanes seguirán peleando por sus derechos y por un trato justo en un sector que es esencial para la economía y el bienestar de la región y del país.