En la ciudad de Hamburgo, conocida por su semana anual de verano, el telón se levantó para el emocionante enfrentamiento de cuartos de final entre Portugal y Francia en la Eurocopa. Este partido, junto con el choque entre España y Alemania, promete ser uno de los encuentros más destacados del torneo.
El encargado de abrir la conferencia de prensa fue la estrella francesa, Kylian Mbappé. Conocido tanto por su destreza en el campo como por su franqueza frente a los medios, Mbappé no defraudó con sus declaraciones. «No podemos dejar nuestro país en las manos de estas personas. Creo que más que nunca hay que ir a votar. Es urgente. Los resultados fueron catastróficos. Esperamos que todo el mundo se movilice para votar y que vote en el lado bueno», afirmó, refiriéndose a la reciente primera ronda de las elecciones legislativas francesas, en las que resultaron victoriosos el RN y Le Pen.
Mbappé, quien ya había manifestado su rechazo a estos partidos al inicio de la Eurocopa, reiteró su llamado a votar contra la ultraderecha. Esta postura quedó clara incluso en su interacción con los periodistas, cuando uno de ellos, situado a su izquierda, le pidió el turno de pregunta de una manera peculiar: «Aquí, Kylian, estoy a su extrema izquierda». A lo que el jugador respondió, entre risas: «Menos mal que no estabas en el otro lado».
También el fútbol fue protagonista
Por supuesto, el fútbol también fue protagonista en la conferencia de prensa. El esperado duelo con Cristiano Ronaldo centró gran parte de la atención. «Es un honor enfrentarme a él. Todo el mundo sabe la admiración que le tengo. Solemos estar en contacto y me da buenos consejos. Poco importa lo que pase después del partido porque seguirá siendo una leyenda», declaró Mbappé.
Esta admiración no es nueva. Durante su adolescencia, la habitación de Mbappé estaba adornada con pósters de Cristiano y solía pasar horas viendo videos de él en YouTube. “Hay que apreciar lo que ha sido y lo que es. Solo admiro la grandeza del jugador. Un jugador único. No habrá nadie como él. Ha marcado la historia del fútbol, ha inspirado a generaciones y ha marcado a un montón de personas. Respeto hacia él, pero espero que mañana no esté contento porque queremos ir a la semifinal», afirmó el francés.
Ahora, Mbappé está listo para seguir los pasos de su ídolo, pero también para marcar su propio territorio. «Su historia fue única. Yo ahora he tenido la oportunidad de comenzar mi sueño de jugar en el Madrid y espero escribir mi propia historia allí», compartió.
Ante el próximo enfrentamiento con Portugal, Mbappé se mostró respetuoso y consciente del desafío: «Cuando juegas ante Portugal, es difícil elegir un jugador. Lo fácil sería decir Cristiano, pero eso sería obviar al resto de los jugadores. Mañana jugamos ante un equipo que tiene a Bruno Fernandes, Leao, Bernardo Silva… No habrá que centrarse en un jugador, porque sería ignorar a los otros. Si te fijas en uno, lo pagas».
Uno de los jugadores a los que Mbappé admira es Pepe, a quien describió como una «leyenda del Madrid, del Oporto y de Portugal». A pesar de ello, dejó claro que su admiración no interferirá con su desempeño en el campo: «Mañana, en el campo, no le respetaré tanto, pero la longevidad y seguir tantos tiempos en el top, no lo hace cualquiera».
Finalmente, Mbappé confirmó que seguirá jugando con la máscara que le ha estado causando incomodidad, pero se mostró decidido a no permitir que esto afecte su rendimiento. «La usaré hasta el final de la competición. Solo puedo darle las gracias, porque sin ella no jugaría. No soy el jugador que busca excusas. Mañana hay que estar al 100 % y ser veloz. Tendré una mejor preparación la próxima temporada, seguro. Ahora, hay unos cuartos y estoy preparado para guiar a mi equipo a la semifinal. Podemos ser campeones de la Eurocopa y tengo ganas de lograrlo», concluyó.