Los polideportivos municipales de la Ciudad del Deporte estarán construidos a finales de 2026

Madrid: La Ciudad del Deporte toma forma

El alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, junto con el presidente del Atlético de Madrid, Enrique Cerezo, y el consejero delegado del club, Miguel Ángel Gil, han dado el primer paso hacia la realización de un ambicioso proyecto que ha estado en desarrollo durante casi dos décadas. En una ceremonia simbólica, Martínez-Almeida introdujo un banderín rojiblanco en una urna que luego fue cerrada y enterrada en la parcela 1 de la futura Ciudad del Deporte.

Este proyecto visionario, que transformará un descampado en una vibrante urbanización deportiva y de ocio, está programado para abrir al público en la segunda mitad de 2026. Además de las instalaciones deportivas municipales, la Ciudad del Deporte incluirá un miniestadio para 7.000 personas, una playa artificial para surfear, un rocódromo y un centro comercial.

La Ciudad del Deporte se construirá en cinco parcelas propiedad del Ayuntamiento de Madrid. Tres de ellas se cederán al Atlético de Madrid durante 75 años mientras que las dos restantes permanecerán bajo gestión municipal. La inversión inicial en las dos parcelas municipales será de 25 millones de euros, pero se espera que el costo total del proyecto supere los 300 millones de euros, todos sufragados por el club rojiblanco.

La visión de la Ciudad del Deporte

Las dos parcelas municipales constituyen el 22,6% de la superficie total del complejo y albergarán diversas instalaciones deportivas en una superficie de 60.000 metros cuadrados. La primera parcela acogerá una pista de atletismo reglamentaria de ocho calles, apta para campeonatos oficiales, y un campo de fútbol 11 en su centro, que también se podrá dividir en dos campos de fútbol 7.

La segunda parcela, una vez finalizada, albergará cuatro pistas polideportivas cubiertas para deportes de equipo como balonmano, fútbol sala o voleibol, así como cuatro pistas de pádel al aire libre. Martínez-Almeida destacó durante la ceremonia que estas dos parcelas «actualmente infrautilizadas» complementarán el resto de las instalaciones de la Ciudad del Deporte, que abarcará 265.000 metros cuadrados de instalaciones deportivas de primer nivel.

El proyecto de la Ciudad del Deporte se presentó inicialmente en el verano de 2022 como un modelo de colaboración público-privado y ha estado en desarrollo durante casi 20 años, atravesando numerosos permisos municipales y modificaciones urbanísticas. «Es la consumación de un sueño», señaló Gil, refiriéndose al proyecto.

La reubicación del antiguo estadio Calderón al distrito de San Blas-Canillejas fue el primer paso en este viaje. «En 2005 empezamos a trabajar de un distrito a otro. Era un reto, un riesgo grande. Pero al ver la parcela, vimos que podíamos convertir un problema en una gran oportunidad», añadió Gil.

La elaboración de los planos del complejo ya ha concluido y estos han sido enterrados en la primera parcela. Además de las instalaciones deportivas públicas, la Ciudad del Deporte ofrecerá una variedad de espacios de ocio y deportes, desde surf hasta golf, escalada y pádel. También habrá un moderno centro comercial con tiendas y restaurantes. Todo el complejo cumplirá con los estándares de sostenibilidad y será climáticamente neutro.

La reordenación de los accesos de la M-40 y del viario interno del entorno se completará este mismo mes de otoño, en respuesta a una demanda de los vecinos que sufren los colapsos de tráfico en cada jornada de partido. Estas obras, que cuestan 30 millones de euros, se encuentran actualmente en fase de asfaltado.

La primera piedra del proyecto se ha colocado este martes tras 19 años de planificación y después de mover un millón de metros cúbicos de tierra. Se espera que los equipamientos municipales estén listos a finales de 2026, y tanto el club como el consistorio confían en inaugurar el resto de la Ciudad del Deporte antes de que termine el mandato, en 2027. No obstante, puede que aún haya que esperar un poco más para que el macroproyecto sea una realidad.