Rumanía hace historia en la Eurocopa con una segunda victoria rotunda
Un récord histórico igualado
Rumanía ha vuelto a hacer historia en la Eurocopa. En sus cinco participaciones previas, el equipo había logrado solamente una victoria en dieciséis partidos. Esa victoria llegó en el torneo del año 2000, cuando vencieron a Inglaterra con un marcador de 3-2. Ahora, han obtenido su segunda victoria en la Eurocopa, esta vez contra Ucrania, con un marcador aún más impresionante de 3-0. Este triunfo rotundo coloca a Rumanía al borde de las eliminatorias. Necesitarán otro impulso en su próximo partido contra Eslovaquia en Frankfurt para asegurar su lugar en los octavos de final.
El regreso de Rumanía al torneo continental evoca los días dorados de la selección amarilla. El nexo de unión son dos apellidos que resuenan en la historia del fútbol rumano, Iordanescu y Hagi, cuya influencia en el equipo se hace sentir treinta años después.
Honor recuperado
En Alemania, los hijos de los míticos Anghel Iordanescu y Gheorghe Hagi, Edward Iordanescu y Ioanis Hagi, están protagonizando la mejor etapa futbolística de Rumanía desde que sus padres llevaron a la selección a los cuartos de final del Mundial de 1994.
«Devolver el honor a Rumanía es solo el comienzo, todavía tenemos mucho por hacer», dijo Edward Iordanescu, refiriéndose al regreso de la selección a la Eurocopa. Por ahora, el legado de sus padres sigue siendo una influencia significativa.
El mito Hagi
Gheorghe Hagi, considerado el futbolista más grande de todos los tiempos en Rumanía, jugó en tres Mundiales y tres Eurocopas y culminó su carrera con 13 títulos y 293 goles en 703 partidos. Su hijo, Ianis, aunque no es un jugador fijo en el once inicial de la selección, ha seguido los pasos de su padre y lleva el número 10 en su camiseta, al igual que Gica.
Edward Iordanescu, por su parte, dejó el fútbol a los 26 años para seguir la carrera de su padre como entrenador. Con el Cluj ganó cuatro títulos entre 2018 y 2021, logrando el crédito necesario para ser el seleccionador de Rumanía.
Retirada a los 26
“Echamos mucho de menos a Ianis durante la lesión, es un jugador con cualidades especiales”, asegura Iordanescu hijo, Edward, seleccionador como su padre y entrenador del segundo Hagi. “Yo quería ser futbolista y triunfar como jugador a un alto nivel, pero las cosas no salieron como planeaba y toda mi energía y ambición, además de lo que aprendí en casa, de mi padre, me dio el impulso para dedicarme a entrenar”, explicó en una entrevista a la UEFA.
El 16 de junio cumplió 46 años, la víspera del primer triunfo sobre Ucrania. A diferencia de su padre, Edward ya ha logrado su primera victoria en la Eurocopa y está a punto de avanzar a los octavos de final.
“Esperamos hacer un buen partido y hacer historia. Nos vale con un empate”, recordó este lunes sobre la situación del grupo, que lidera por la diferencia de goles ya que los otros tres componentes (Eslovaquia, su rival, Bélgica y Ucrania) cuentan con tres puntos.
Más hijos famosos
Los apellidos Iordanescu y Hagi no son los únicos que evocan a sus notables progenitores. Hay otros que resultan también familiares para el gran público. El portero de Dinamarca, Kasper Schmeichel, alarga la tradición del padre, Peter, campeón sorpresa de la edición de 1992. Hoy es comentarista en una cadena de televisión. Disputó cuatro Eurocopas, y Kasper ha jugado tres. Tiene ya 38 años.
En Italia es visible el apellido Chiesa. Federico es el hijo y participó el lunes en la milagrosa clasificación de la azzurra en el último minuto frente a Croacia. Aún no ha marcado en esta edición, sí lo hizo en la de 2020, cuando Italia salió campeona el Wembley. Su padre Enrico marcó un gol en Inglaterra-96.
No es tan visible en Portugal el apellido Conceiçao. Francisco, ese el nombre de la camiseta, vivió la noche de gloria al marcar en el tiempo añadido el triunfo sobre la República Checa. Sergio, el padre, el técnico del Opotro en las últimas campañas, le metió tres a Alemania en la edición de 2000. Portugal sucumbió en la semifinal ante Francia.
Liliam Thuram era el lateral derecho de los galos. Lo fue en cuatro Eurocopas, campeón en la de 2000 y campeón mundial en 1998. Su hijo Marcus juega en la otra esquina del campo: es extremo izquierdo. No tiene ningún título internacional. Ha sido campeón de la Serie A con el Inter.
Danny Blind, el central del Girona y pieza clave en la histórica clasificación del cuadro rojiblanco, no se ha estrenado en Alemania aunque participó asiduamente en el Mundial de Qatar-2022. El padre, Daley, fue titular con los Países Bajos en las dos Eurocopas que jugó.