El Valencia – Real Madrid era un encuentro de alta tensión, un partido que muchos habían resaltado en sus agendas. Sin embargo, la controversia en esta ocasión no se limitó a las acciones en la cancha, sino que se centró en las decisiones del árbitro Gil Manzano, cuyo manejo del final del partido fue objeto de críticas por parte del conjunto blanco.
El colegiado había advertido a los jugadores que, tras la ejecución de un córner, daría por terminado el encuentro. De acuerdo a sus palabras, esa era la última jugada. Sin embargo, tras un rechace permitió que el juego continuara y Bellingham anotó lo que parecía ser el gol de la victoria y la remontada para el Real Madrid.
Gil Manzano había anunciado a los jugadores que el partido finalizaría tras el córner. Sin embargo, se llevó el silbato a la boca, para luego quitarlo, y finalmente, decretó el final del partido. Bellingham terminó siendo expulsado en medio de las protestas. En Valencia también hubo confusión. «No sabemos por qué tarda en pitar. Deja que la coja Brahim y no pita. Yo entiendo a los jugadores del Real Madrid», se escuchó en el banquillo.
Este incidente trae a la memoria un precedente similar en Valladolid. Las reacciones del equipo blanco no se hicieron esperar. Tchouaméni criticó la situación en las redes sociales, tildándola de vergonzosa. Vinicius también expresó su inconformidad en los medios del club, con una declaración contundente: «No nos han dejado ganar».
Según informa el reconocido analista deportivo Míster Chip, Gil Manzano pitó el final del partido a los 98’40» mientras el centro de Brahim Díaz volaba hacia la cabeza de Bellingham, quien marca en el 98′ 42″. Este incidente recuerda a otro ocurrido el 14 de mayo de 2023 en un Valladolid-Sevilla, en el que Ortiz Arias anuló un gol de Escudero.
Este tipo de decisiones polémicas no son nuevas en el mundo del fútbol. Los defensores del arbitraje argumentan que se toman en fracciones de segundo y bajo una presión intensa. Sin embargo, los críticos señalan que estos errores pueden tener un impacto significativo, especialmente en partidos de alta tensión como el Valencia – Real Madrid.
La frustración de los jugadores del Real Madrid es comprensible, dado que el gol anulado de Bellingham podría haber cambiado el resultado del partido. Sin embargo, este incidente también pone de relieve la necesidad de una mayor claridad y transparencia en las decisiones arbitrales.
En el fútbol, como en cualquier deporte, la justicia y la equidad deben ser primordiales. Los fanáticos, jugadores y entrenadores merecen saber que se están tomando decisiones justas y que el resultado de un partido no se ve afectado por un error arbitral.
