China ya ha llegado a los 10.000 metros bajo suelo con su pozo superprofundo

China, uno de los gigantes mundiales en innovación tecnológica y ciencia, ha anunciado recientemente un gran avance en su último proyecto científico. En mayo de 2023, las autoridades chinas dieron a conocer la puesta en marcha de un proyecto de gran magnitud enfocado en la excavación de un pozo de gran profundidad con objetivos estrictamente científicos. Apenas una semana atrás, China confirmó que las obras no solo van a buen ritmo sino que están a punto de alcanzar, antes de lo previsto, su objetivo.

El pozo, ubicado en el interior del desierto de Taklimakan en la cuenca del Tarim, se espera que el proyecto, bautizado como ‘Shenditake 1’, alcance los 11.100 metros una vez finalizado. Se trata del primer pozo de exploración científica de China diseñado para superar una profundidad de 10.000 metros, informa la agencia de noticias Xinhua.

Durante el proceso de perforación, el equipo, que incluye brocas y tubos de perforación que pesan más de 2.000 toneladas, se sigue adentrando profundamente en la Tierra, penetrando en más de 10 estratos continentales. Este logro es un hito importante para la ciencia china, ya que supone un gran avance en la comprensión del interior de nuestro planeta.

Hasta ahora, el pozo más profundo excavado por el ser humano sigue siendo el pozo superprofundo de Kola, cerca de Murmansk, en el Ártico ruso, que la Unión Soviética inició en 1970 y que alcanzó una profundidad de 12.262 metros. Esta perforación fue cerrada en 2008, cuando las instalaciones quedaron abandonadas.

La cuenca del Tarim, en China, es una de las áreas más difíciles de explorar debido a su duro entorno terrestre y sus complicadas condiciones subterráneas. Aun así, los científicos chinos han demostrado estar a la altura del desafío, logrando progresos significativos en la perforación de la cuenca.

Oficialmente, al menos, el objetivo de este proyecto es meramente científico, para estudiar el subsuelo hasta llegar a las rocas del sistema Cretácico, que se remontan a 145 millones de años. Sin embargo, no se descarta alguna intencionalidad minera, aunque las autoridades chinas no han confirmado nada al respecto.

La maquinaria atravesará diez capas de rocas hasta llegar a su objetivo, que inicialmente esperaba lograr en unos dos años, y que servirá, según las autoridades chinas, para identificar recursos minerales y ayudar a evaluar riesgos ambientales como terremotos y erupciones volcánicas.

La dificultad de construcción del proyecto de perforación se puede comparar con conducir un camión grande sobre dos cables de acero delgados, dijo Sun Jinsheng, académico de la Academia de Ingeniería de China, a la agencia de noticias estatal Xinhua sobre el nuevo proyecto en este país.

Por último, aunque el objetivo inicial es alcanzar los 11.100 metros de profundidad, hay quienes no descartan que, una vez alcanzada esta cifra, la maquinaria pueda seguir trabajando para superar el récord de profundidad alcanzado por los soviéticos con su pozo de Kola. Sin embargo, esta posibilidad todavía no ha sido confirmada por las autoridades chinas.