Cañete (Pimec) reclama configurar un nuevo Gobierno «tan rápido como sea posible»

En un llamado urgente a los partidos con representación en el Parlamento, el presidente de la patronal Pimec, Antoni Cañete, ha exhortado a los políticos a acelerar el proceso de formación de un nuevo gobierno catalán. Durante una entrevista con ‘El Món’, insistió en la necesidad de un gobierno que sea capaz de tomar decisiones rápidas y efectivas.

Cañete enfatizó que, si bien como líder de una organización empresarial, no es su lugar expresar preferencias por los candidatos, sí tiene la responsabilidad de instar a la investidura de un nuevo presidente catalán. Al abogar por un ejecutivo fuerte y decisivo, destacó la necesidad de estabilidad política para fomentar una atmósfera de crecimiento económico y bienestar social en Cataluña.

Además, el presidente de Pimec advirtió contra la posibilidad de una repetición electoral. A su juicio, tal escenario solo prolongaría el periodo de interinidad en el Govern y aumentaría la desafección entre la ciudadanía. Insistió en que «todo apunta a que habría un resultado similar al actual», lo que a su juicio, solo serviría para aumentar la desafección y el descontento ciudadano.

El impacto del ‘procés’ en el tejido empresarial catalán

Cañete también reflexionó sobre el impacto del ‘procés’ en el tejido empresarial catalán. Recordó que durante este período, muchas empresas trasladaron sus sedes fuera de Cataluña en busca de estabilidad. Sin embargo, indicó que si se evitan nuevas incertidumbres, estas compañías volverán «de manera natural». El mundo económico, según Cañete, se mueve de acuerdo con sus intereses y busca estabilidad, un factor clave para la salud financiera de cualquier empresa.

En este sentido, el presidente de la patronal Pimec subrayó la relevancia de la seguridad jurídica y la confianza empresarial para el bienestar económico de Cataluña. Su llamado a un gobierno fuerte y estable no es solo un grito para la eficiencia política, sino también una demanda para el desarrollo económico y la protección de los intereses empresariales.

Por otro lado, Cañete defendió la ley de amnistía, argumentando que serviría para normalizar la situación en Cataluña y dirimir las diferencias. Según él, la «partida debería volver a un ámbito de donde no debería haber salido nunca». Al abogar por la reconciliación y la estabilidad, Cañete subrayó la importancia de la salud política para el bienestar general de Cataluña.

En última instancia, el llamado de Cañete apunta a la urgencia de la estabilidad política y económica en Cataluña. Como representante de los intereses empresariales, su voz resuena con la necesidad de un gobierno sólido, capaz de tomar decisiones firmes y proporcionar un entorno seguro y estable para las empresas y los ciudadanos.

Así, con su postura clara y decidida, Antoni Cañete se muestra como un defensor de la estabilidad y el progreso en Cataluña, una figura que entiende la relevancia de la política en el bienestar económico y social de la región.