El pleno del Ayuntamiento de Albacete, en una sesión extraordinaria celebrada este lunes, dio cuenta del paso de tres de los cuatro concejales de Vox a la condición de no adscritos y el cambio de portavoz en este grupo municipal, que ahora será Lorena González, la única concejala que mantiene este partido en el consistorio.
El que fuera candidato a la alcaldía de Albacete por Vox, José Ramón Conesa; así como su portavoz municipal hasta ahora, Leticia Alejandra Martínez; y José Bernabé Cotillas ya son concejales no adscritos, después de que su partido les suspendiera de militancia al haberse abstenido para facilitar la aprobación del presupuesto del Ayuntamiento de Albacete para 2024.
En la sesión plenaria, Lorena González aseguró que seguirá trabajando «por la ciudad de Albacete, para que en las próximas elecciones decidan apostar por esta formación».
Al término del pleno, y en declaraciones a los medios, los tres ediles expulsados de Vox recordaron que el asunto está en manos de la justicia y lamentaron que en estos meses nadie de la dirección nacional se haya puesto en contacto con ellos.
Asimismo, reafirmaron su intención de mantener las actas: «Somos concejales porque así lo quiso la ciudadanía en las urnas«, defendió Conesa.
Por otro lado, el pleno del ayuntamiento acordó la nueva composición de las comisiones informativas y organismos autónomos municipales y se aprobó que, por primera vez en la historia del consistorio albaceteño, se aplique el voto ponderado en los órganos municipales donde participan los concejales.
La medida contó con el voto en contra de Unidas Podemos y la abstención del PSOE, algo que para la portavoz municipal del PP, Rosa González de la Aleja, fue «ganas de tangana» porque, como defendió, «ustedes pidieron el voto ponderado».
La portavoz de Unidas Podemos, Nieves Navarro, justificó su postura en que «aunque el voto ponderado es más justo», es una «anomalía democrática» que personas «que han sido expulsadas de su partido puedan permanecer en las comisiones informativas».
La portavoz del PSOE, Amparo Torres, que acusó al alcalde de Albacete, Manuel Serrano, de abordar estos asuntos un 19 de agosto -en el pleno de julio se dejaron sobre la mesa, aunque estaban en el orden del día- para «que pasen desapercibidos», justificó su abstención en que «carece de los informes pertinentes que avalen esta propuesta que presenta el señor alcalde».
Por su parte, el regidor municipal subrayó que el voto ponderado es «el fiel reflejo de la composición que las urnas han otorgado en el ayuntamiento, porque el voto de cada concejal traslada el número de concejales que tiene su grupo».
Y añadió que así, las votaciones en comisiones informativas, consejos y juntas rectoras de organismos autónomos reflejarán la representación real de cada uno de los concejales que participen en esos órganos.
El impacto político en Albacete
El pleno del Ayuntamiento de Albacete ha sido el escenario de un cambio significativo en la política local. Tres de los cuatro concejales de Vox han pasado a la condición de no adscritos, un movimiento que ha generado controversia y reacciones en los diferentes partidos políticos. Lorena González, la única concejala que sigue siendo parte de Vox en el consistorio, ha asumido el papel de portavoz del grupo municipal.
La decisión de suspender de militancia a José Ramón Conesa, Leticia Alejandra Martínez y José Bernabé Cotillas se produjo después de que estos se abstuvieran en la votación para aprobar el presupuesto del Ayuntamiento de Albacete para 2024. Este acto de abstención fue visto por la dirección de Vox como una traición a los principios del partido, lo que llevó a su inmediata expulsión.
En la sesión plenaria, Lorena González manifestó su compromiso de seguir trabajando en beneficio de la ciudad de Albacete y expresó su esperanza de que en las próximas elecciones los ciudadanos decidan apoyar a su formación. Esta postura contrasta con la de sus excompañeros, quienes han decidido mantener sus actas de concejales, argumentando que fueron elegidos por la ciudadanía y no por el partido.
La controversia no termina aquí. Los tres ediles expulsados han dejado claro que el asunto está en manos de la justicia y lamentaron que durante todo este proceso, ninguna figura de la dirección nacional de Vox se haya puesto en contacto con ellos. Este distanciamiento ha sido criticado públicamente por los concejales, quienes se sienten abandonados por su antiguo partido.
El pleno del Ayuntamiento también abordó la nueva composición de las comisiones informativas y organismos autónomos municipales. Se aprobó, por primera vez en la historia del consistorio albaceteño, la aplicación del voto ponderado en los órganos municipales donde participan los concejales. Esta medida ha sido recibida con reacciones mixtas por parte de los diferentes grupos políticos.
Unidas Podemos votó en contra, mientras que el PSOE optó por la abstención. Rosa González de la Aleja, portavoz municipal del PP, criticó estas posturas, acusando a ambos partidos de buscar crear conflictos. Por su parte, Nieves Navarro, portavoz de Unidas Podemos, defendió su voto en contra argumentando que, aunque el voto ponderado es más justo, es una anomalía democrática que personas expulsadas de su partido puedan seguir participando en las comisiones informativas.
Amparo Torres, portavoz del PSOE, criticó al alcalde Manuel Serrano por abordar estos asuntos en una sesión extraordinaria el 19 de agosto, acusándolo de querer que pasen desapercibidos. Torres justificó la abstención de su partido alegando la falta de informes pertinentes que avalen la propuesta del alcalde.
Manuel Serrano, por su parte, defendió la implementación del voto ponderado como una medida que refleja fielmente la composición que las urnas han otorgado en el ayuntamiento. Según Serrano, el voto de cada concejal trasladará el número de concejales que tiene su grupo, lo que permitirá que las votaciones en comisiones informativas, consejos y juntas rectoras de organismos autónomos reflejen la representación real de cada uno de los concejales.
El impacto de estos cambios no se limita a la política local de Albacete. El secretario de Organización del PSOE de Castilla-La Mancha, Sergio Gutiérrez, ha criticado al presidente regional del PP, Paco Núñez, por su incapacidad para poner orden en su propio partido. Gutiérrez ha exigido a Núñez que cumpla el pacto antitransfuguismo y que rompa relaciones en Albacete, La Guardia y Camuñas, donde considera que el PP está gobernando con tránsfugas.
En una publicación en su perfil de la red social X (antes Twitter), Gutiérrez destacó que el PP gobierna en La Guardia con tránsfugas de Unidas Podemos y permite que la alcaldía de Camuñas siga en manos de un alcalde que ha sido criticado por sus declaraciones. Además, mencionó que el PP apoya el gobierno de Albacete en tres tránsfugas de Vox, lo que, según él, es una muestra de la falta de coherencia y disciplina dentro del partido.
Gutiérrez también criticó al PP por mantener pactos de gobierno con Vox en Castilla-La Mancha, un partido que tiene un diputado condenado a seis meses de cárcel y que, según él, niega la violencia de género, censura la cultura y rompe la solidaridad con la inmigración. Estas críticas reflejan la tensión política que se vive en la región y la importancia de los recientes acontecimientos en Albacete.
El panorama político en Albacete se encuentra en un momento de incertidumbre y reacomodación. La expulsión de los tres concejales de Vox y la implementación del voto ponderado en las comisiones informativas y organismos autónomos municipales son solo algunos de los cambios que están configurando un nuevo escenario político en la ciudad. Las próximas elecciones municipales serán determinantes para definir el futuro de Albacete y la influencia de los diferentes partidos en su gobierno local.