El camino hacia la longevidad saludable: escuchar a nuestro cuerpo
Nuestro cuerpo es una máquina increíblemente sofisticada que nos envía señales constantemente. Signos de cansancio, falta de energía, insomnio, ansiedad, depresión, dolores crónicos, migrañas, desarreglos menstruales, alergias, eczemas, gases o hinchazón abdominal son algunas de las formas en las que nuestro cuerpo nos indica que algo no está funcionando bien en nuestro interior o en nuestro entorno vital.
La interconexión entre el cerebro, el sistema inmunitario y el comportamiento, junto con la importancia de seguir e interpretar nuestros ritmos circadianos, son temas cruciales que el experto en salud, Xevi Verdaguer, aborda en su libro ‘Tu salud empieza aquí’. Esta obra está dirigida a aquellos que buscan mejorar su salud y disfrutar de una longevidad saludable a nivel físico, mental y emocional.
Una mirada detallada a la salud y el bienestar
Verdaguer sostiene que la clave para resolver problemas crónicos como el colon irritable, la fatiga crónica, la fibromialgia, las depresiones severas o las enfermedades autoinmunes radica en reequilibrar la microbiota intestinal. Según él, es crucial ir a la raíz del problema como la forma más óptima de solucionarlo. Pero también hace hincapié en la importancia de combatir el estrés crónico y ajustar los ritmos circadianos.
En su obra, Verdaguer defiende una perspectiva integral de la salud, que vincula la mente, el cuerpo y las emociones. En las últimas décadas, se ha ido descubriendo que todo en nuestro cuerpo está interrelacionado. La microbiota intestinal, la neurociencia y los ritmos circadianos son solo algunos de los campos en los que se ha avanzado considerablemente. Verdaguer se esfuerza por resumir la importancia de estas conexiones en su libro.
En el capítulo titulado ‘El viaje de un pedo’, Verdaguer explica qué aspectos de nuestro cuerpo deberíamos reparar en función de lo que vayamos sintiendo. En la sección dedicada a la neurociencia, aborda cómo están relacionados aspectos como la motivación, el hambre, la saciedad, el estado de ánimo y la energía. En cuanto a los ritmos circadianos, realiza un recorrido por los genes ‘clock’, que regulan la asignación energética a los órganos con actividad biológica diurna y nocturna, y proporciona consejos sobre cómo activar estos genes.
La alteración de los ritmos circadianos puede generar inflamación en el cuerpo, al igual que el estrés crónico o las alteraciones de la microbiota. Por lo tanto, el mantenimiento de estos ritmos es esencial para nuestra salud.
Problemas de salud comúnmente normalizados
Verdaguer señala que muchos de nosotros normalizamos una serie de problemas de salud que deberían ser señales de alarma. Por ejemplo, afirma que lo normal sería despertarse por la mañana con claridad mental, ganas de hacer cosas, foco y concentración. También deberíamos tener hambre y ganas de defecar al despertar. Estas señales indicarían una buena activación de las hormonas que regulan el estrés.
En cambio, no es normal despertarse con niebla mental, rigidez, dolores musculares, frío, desgana y sin ganas de ir al servicio. Si no defecas poco después de despertar, algo no va bien en tu cuerpo. Las personas que defecan al mediodía o por la tarde suelen estar cansadas con frecuencia, pican a menudo y suelen tener problemas digestivos.
Además, Verdaguer señala que es común que algunas personas se despierten con el abdomen plano pero comienzan a hincharse a lo largo de la tarde-noche. Esta hinchazón puede indicar la presencia de algún tipo de disbiosis, estrés crónico o dificultades para dormir.
Inflamación intestinal y la importancia de los ritmos circadianos
Según Verdaguer, si los problemas de salud son digestivos, el intestino siempre nos lo indicará a su manera. Por ejemplo, si los problemas son de la parte alta, como la gastritis o el reflujo, las personas pueden experimentar apneas del sueño, despertares o falta de descanso nocturno. Si tienes problemas de estómago, es probable que duermas mal.
Por otro lado, si el problema inflamatorio está en el intestino delgado y en el colon, es posible que se produzcan problemas de ansiedad y depresión. El intestino es considerado el primer cerebro debido a su importancia en la producción de neurotransmisores como la serotonina y el GABA (Ácido Gamma Amino Butírico). Si el intestino está inflamado, no será capaz de absorber correctamente los nutrientes ni de producir adecuadamente estos neurotransmisores, lo que puede conducir a problemas de salud mental.
Verdaguer sostiene que la consistencia y la frecuencia con la que defecamos pueden predecir el futuro de nuestra salud. Si una persona tiene estreñimiento, diarrea o cualquier otra alteración en este sentido, es probable que esté sufriendo el efecto de patógenos en el intestino.
El papel de los ritmos circadianos en nuestra salud
Para Verdaguer, una de las herramientas más poderosas para proteger nuestra salud tiene que ver con los ritmos circadianos. En su libro, explica que una vez que aprendemos a dar órdenes sincronizadoras a nuestros genes ‘clock’, comenzamos a notar los beneficios de inmediato.
La regulación de los ritmos circadianos es crucial para mantener nuestra salud. El experto sugiere que siempre debemos comer en horarios diurnos y evitar las comidas durante la noche. Según él, lo ideal sería desayunar con la luz del día, no demasiado temprano, y cenar lo más temprano posible. Asegura que es mejor cenar a las seis de la tarde que a las nueve de la noche. Y recuerda que no es normal defecar a mediodía o por la noche. Lo normal es hacerlo por la mañana.
En resumen, Verdaguer defiende una visión integral de la salud, que implica escuchar a nuestro cuerpo, entender las señales que nos envía y tomar medidas para mantener un equilibrio en nuestros ritmos circadianos, nuestra microbiota intestinal y nuestro sistema inmunitario.