Un incidente aterrador y confuso ocurrió en el Metro de Granada cuando una cápsula de gas fue liberada durante el viaje, llenando el compartimento con humo en cuestión de segundos. Aunque se ha confirmado que nadie tuvo que ser hospitalizado, los pasajeros describieron las sensaciones de mareo y asfixia que experimentaron durante esos minutos de terror.
De acuerdo con fuentes de la Consejería de Fomento de la Junta de Andalucía, encargada de la infraestructura del metro, el incidente tuvo lugar a las 14:40 horas en la única línea operativa entre las localidades de Albolote y Armilla.
El tren se encontraba en su camino hacia la terminal de Armilla cuando, justo antes de realizar su parada en la Avenida Dílar, en el distrito del Zaidín, un pasajero abrió un tarro que llevaba consigo. Este tarro contenía un gas de una sustancia que aún no se ha determinado, pero que se dispersó inmediatamente por todo el compartimento del tren.
El terror en el metro: la broma que pudo acabar en tragedia
El pasajero responsable del incidente logró huir cuando el tren llegó a la mencionada parada. Sin embargo, el resto de los pasajeros quedaron atrapados en el vagón con el gas, sufriendo los efectos de lo que aparentemente era una broma de mal gusto. Durante el viaje a Armilla, que duró hasta cuatro estaciones después, los pasajeros rogaban que se abrieran las puertas para poder salir. Durante este tramo del recorrido, el metro circula en superficie.
Finalmente, en Armilla, el vagón fue desalojado y ventilado. Los pasajeros que habían estado a punto de asfixiarse pudieron finalmente respirar con alivio. Este incidente está siendo investigado por la Policía Nacional, que busca a un joven sospechoso que, según varios testigos, vestía pantalones vaqueros y una camiseta amarilla.
Este incidente ha generado preocupación y miedo entre los usuarios del Metro de Granada. Los pasajeros afectados describieron los momentos de pánico que vivieron, con sensaciones de asfixia y mareos, y cómo los minutos que duró el incidente les parecieron interminables.
La liberación de gas en un espacio cerrado, como un vagón de metro, puede tener graves consecuencias para la salud y el bienestar de las personas presentes. En este caso, aunque no se ha determinado aún la sustancia exacta del gas liberado, los efectos inmediatos incluyeron sensaciones de mareo y asfixia.
Los incidentes como este ponen de relieve la importancia de las medidas de seguridad y emergencia en el transporte público. Los pasajeros deben estar preparados para situaciones de emergencia y saber cómo reaccionar en casos similares. También es crucial que las autoridades tomen medidas adecuadas para garantizar la seguridad de los pasajeros y prevenir incidentes de esta naturaleza en el futuro.
La Policía Nacional continúa con la investigación del incidente y busca al sospechoso, mientras que las autoridades de la Consejería de Fomento de la Junta de Andalucía, responsables de la infraestructura del metro, están evaluando las medidas de seguridad existentes y la respuesta al incidente.
La comunidad de Granada ha sido sacudida por este incidente y espera que se tomen medidas para garantizar que los viajes en el metro sean seguros y que no se repitan incidentes similares en el futuro.