La Comisión Europea pone en la mira a Microsoft por presuntas prácticas antimonopolio
El gigante de la tecnología, Microsoft, está actualmente bajo la lupa de la Comisión Europea por presuntas infracciones a las normas antimonopolio de la Unión Europea. Las sospechas se centran en la vinculación de la aplicación Teams con los paquetes de productividad para empresas Office 365 y Microsoft 365. El organismo regulador europeo ha comunicado sus inquietudes a la empresa fundada por Bill Gates, tras una investigación preliminar que concluye que la compañía estadounidense es «dominante a nivel mundial» en el mercado de aplicaciones de productividad para uso profesional.
La vicepresidenta ejecutiva de la Comisión Europea, Margrethe Vestager, ha expresado su preocupación por la posibilidad de que Microsoft esté otorgando a su propio producto de comunicación Teams una ventaja indebida sobre sus competidores, al vincularlo a sus populares suites de productividad para empresas. Vestager subrayó que la preservación de la competencia en las herramientas de comunicación y colaboración a distancia es esencial para fomentar la innovación en estos mercados.
«De confirmarse, la conducta de Microsoft sería ilegal»
La alta funcionaria advirtió que «de confirmarse, la conducta de Microsoft sería ilegal con arreglo a nuestras normas de competencia». Microsoft, que se había mantenido fuera del radar de los servicios de la competencia comunitarios en los últimos diez años, podría enfrentar una multa de hasta el 10% del volumen de negocios anual mundial y medidas correctivas para corregir la situación.
Microsoft, con sede en Estados Unidos, es un proveedor líder de software de productividad y empresarial. La empresa está expandiendo cada vez más su oferta de la herramienta de comunicación y colaboración basada en la nube, Teams. Esta aplicación ofrece funcionalidades como mensajería, llamadas, reuniones de vídeo y uso compartido de archivos, y reúne las herramientas de trabajo de Microsoft y de terceros, así como otras aplicaciones.
En teoría, la computación en nube permite a los nuevos operadores del mercado ofrecer soluciones SaaS y a los clientes utilizar varios programas informáticos de distintos proveedores. Sin embargo, el modelo de negocio de Microsoft se centra en Teams, que combina varios tipos de software en una única oferta. Cuando se lanzó Teams, Microsoft lo incluyó en sus suites de productividad en la nube ampliamente utilizadas por los clientes empresariales Office 365 y Microsoft 365.
La Comisión Europea está particularmente preocupada de que, al menos desde abril de 2019, Microsoft haya estado vinculando Teams con sus principales aplicaciones de productividad SaaS, restringiendo así la competencia en el mercado de productos de comunicación y colaboración. Esta práctica también podría reforzar su posición de mercado en el software de productividad y proteger su modelo basado en suites de los proveedores competidores de software individual.
El organismo regulador europeo teme que Microsoft haya otorgado a Teams una ventaja de distribución al no dar a los clientes la opción de adquirir o no acceso a Teams cuando se suscriben a sus aplicaciones de productividad SaaS. Esta ventaja «puede haberse visto exacerbada» por las limitaciones de interoperabilidad entre los competidores de la aplicación y las ofertas de Microsoft. «La conducta puede haber impedido a los rivales competir, y a su vez innovar, en detrimento de los clientes del Espacio Económico Europeo», advierte la Comisión.
La Comisión Europea considera que los cambios introducidos por la empresa tras la apertura de la investigación por parte de Bruselas en julio del año pasado son «insuficientes» y que son necesarios «más cambios en la conducta» de la compañía para restablecer la competencia.