Marruecos y España repelen un intento de salto de la valla de Ceuta de cien subsaharianos

En un esfuerzo conjunto, las Fuerzas de Seguridad marroquíes y españolas lograron repeler un intento de invasión en Ceuta, una ciudad autónoma de España ubicada en la costa norte de África. Alrededor de un centenar de inmigrantes de origen subsahariano intentaron saltar el vallado fronterizo en la madrugada del miércoles, pero no tuvieron éxito en su intento de acceder a territorio español.

Según fuentes de la Comandancia de la Guardia Civil en Ceuta, el incidente tuvo lugar alrededor de las 7:00 de la mañana en un punto medio de la doble valla que separa la ciudad española del Reino alauita. La barrera tiene una longitud total de 8,2 kilómetros y se encuentra fortificada para impedir la entrada ilegal de inmigrantes.

El despliegue de agentes marroquíes fue crucial para controlar la situación. Su presencia en la frontera evitó que una gran parte del grupo de inmigrantes lograse escalar las vallas. Sin embargo, se informó que «unos quince» lograron llegar a la parte superior de la valla exterior, aunque no pudieron cruzar al territorio español.

La Benemérita, un término usado para referirse a la Guardia Civil, solicitó el apoyo del Cuerpo de Bomberos de la Ciudad para ayudar a esos inmigrantes a bajar de la valla. Posteriormente, y debido a que no habían logrado cruzar a territorio español, fueron devueltos al país vecino en aplicación del principio de «rechazo en frontera».

Este incidente marca el último intento en grupo de saltar la valla de Ceuta por vía terrestre desde hace medio año. Desde entonces, sólo se habían registrado entradas puntuales y esporádicas en la ciudad de esta forma, lo que indica un aumento en la presión migratoria.

En los últimos meses, la presión migratoria sobre Ceuta se ha concentrado en los espigones marítimos del Tarajal y Benzu, los extremos sur y norte del perímetro fronterizo local. En estos puntos se registran intentos de entrada casi a diario a nado tanto de adultos como de menores no acompañados.

Según el último balance publicado por el Ministerio del Interior, entre el 1 de enero y el 31 de marzo han llegado a Ceuta 805 inmigrantes irregulares. Esta cifra representa un aumento del 265,9% en comparación con el mismo periodo del año 2023, cuando se registró la entrada de 220 inmigrantes.

Esta situación pone de relieve la creciente presión migratoria sobre la ciudad autónoma de Ceuta y el desafío que enfrenta España para controlar sus fronteras. Las Fuerzas de Seguridad marroquíes y españolas continúan trabajando en colaboración para asegurar la frontera y evitar la entrada ilegal de inmigrantes.