El objetivo al descuento en el carburante hace mella en los costos y la inflación detiene su evolución a la baja de los últimos meses. En el primer mes del año, el Índice de Costos de Consumo (IPC) sube una décima, hasta el 5,8%, al paso que el indicio subyacente repunta cinco décimas, hasta el 7,5%, según los datos adelantados publicados por el Centro Nacional de Estadística (INE).
Como especifican, la subida de la inflación general es adecuada, primordialmente, a que los costes de los carburantes suben mucho más que en el primer mes del año de 2022 y a que el descenso de los costos del vestido y zapato es menor que en el año pasado. En sentido opuesto, resalta la bajada de los costos de la electricidad, mayor que en el primer mes del año de 2022.
Con la subida del comienzo de año, los costos ponen fina una racha bajista de cinco meses seguidos. Eso sí, aún se ponen lejos de aquel 10,8% registrado en el mes de julio del año pasado, en el momento en que la inflación tocó máximos desde septiembre de 1984.
Hasta entonces, la inflación subyacente se ubica en el primer mes del año de 2023 en su nivel mucho más alto desde diciembre de 1986.
Por otra parte, el Índice de Costes de Consumo Armonizado (IPCA) se ubica en el 5,8%, tres décimas mayor a la registrada el mes previo.
El INE enseña que el IPC de enero de 2023 emplea, por vez primera, ponderaciones que proceden de la Contabilidad Nacional y también tiene dentro los mercados libres del gas y la electricidad. El organismo va a hacer públicos el próximo 15 de febrero los datos terminantes del IPC de enero.