El día 23 de abril, a solo un mes del 50 aniversario de la coronación canónica de la Virgen de la Hiniesta, la hermandad de la Hiniesta debutó un nuevo manto bordado para la imagen titular de gloria. Esta impresionante pieza de bordado fue realizada en el taller de Manuel Solano, siguiendo el diseño de Gonzalo Navarro.
Este manto, una obra de arte en sí misma, fue bordado en oro sobre un terciopelo de seda de un color celeste turquesa con efecto tornasolado. Fue donado por el grupo de mujeres del ropero de la Virgen de la Hiniesta. Este grupo, fundado hace casi cuarenta años, se encarga del mantenimiento del ajuar de la Virgen tanto en su aspecto doloroso como en su aspecto glorioso.
El estilo del manto es gótico y simétrico, en consonancia con el estilo de la Virgen. El manto contiene una cenefa amplia con galón que rodea la pieza en su totalidad. Las flores de lis, un símbolo de la realeza, están distribuidas en toda la obra.
En la parte central del manto, se encuentra una cartela con el lema de la ciudad de Sevilla, NO&DO. Para la creación de este manto se han utilizado diversas técnicas de bordado, incluyendo la hojilla y la muestra armada.
Este nuevo manto estará expuesto en el Ayuntamiento de Sevilla durante una muestra organizada por la hermandad entre finales de abril y principios de mayo. En esta muestra también se exhibirá el nuevo baldaquino de la Virgen de la Hiniesta, realizado en el taller de orfebrería Ramos. Este evento está organizado con motivo del 50 aniversario de la coronación canónica de la titular de la corporación de San Julián y el 375 aniversario del voto de la ciudad a la imagen.
El grupo del ropero de la Virgen, que donó el manto bordado, recibió su primer encargo en 1986, cuando se les encomendó la restauración de la saya roja de Juan Manuel Rodríguez Ojeda. Desde entonces, el patrimonio de las dos imágenes ha crecido de manera constante.
En las dependencias de la casa hermandad, este grupo mantiene y viste la sala de exposiciones, donde se guarda todo el ajuar de la Virgen. Además, participan de manera muy activa en la vida diaria de la corporación y trabajan semanalmente en el grupo de costura.
Este manto, nacido de la dedicación y el talento del grupo del ropero de la Virgen y los diseñadores y artesanos del taller de Manuel Solano, es un tributo a la devoción que la ciudad de Sevilla tiene por la Virgen de la Hiniesta. Con su bordado en oro y su terciopelo celeste turquesa, este manto es un testimonio del amor y la veneración que la ciudad siente por su patrona.