El partido político de extrema derecha en Alemania, Alternativa para Alemania (AfD), ha dejado oficialmente su grupo en el Parlamento Europeo, Identidad y Democracia (ID). Esta decisión se produjo después de que el grupo decidiera expulsar a la formación alemana debido a unas controvertidas declaraciones de su principal candidato para las elecciones europeas, Maximilian Krah.
Krah había hecho una afirmación polémica, sosteniendo que no se podía asumir «automáticamente» que todos los miembros de las SS, la organización paramilitar del régimen nazi en Alemania, eran criminales. Esta postura no sólo generó una oleada de críticas en toda Europa, sino que también fue el catalizador de la expulsión de AfD del grupo parlamentario ID.
La controversia de Maximilian Krah
El vicepresidente del partido, Peter Boehringer, confirmó la noticia de la salida oficial del AfD del grupo durante la conferencia del partido celebrada en Essen, Alemania. Este evento, que tuvo lugar con estrictas medidas de seguridad, también vio la reelección de Tino Chrupalla y Alice Weidel como colíderes de AfD.
La salida del AfD del grupo parlamentario ID se produjo a pesar de que la propia AfD había retirado a Krah de la campaña y de la bancada en la Eurocámara. Sin embargo, estas medidas no lograron una reconciliación con el grupo parlamentario ID, lo que finalmente resultó en la expulsión oficial del AfD.
La conferencia del partido AfD en Essen no estuvo exenta de protestas. Durante la jornada del sábado, la ciudad fue escenario de manifestaciones contra la conferencia, con una asistencia estimada entre 20.000 y 50.000 manifestantes, según datos proporcionados por la policía y los organizadores de las protestas, respectivamente.
El domingo, sin embargo, las protestas fueron significativamente menores. Unas 150 personas participaron en una vigilia en las inmediaciones del congreso Grugahalle, y no se registraron episodios violentos significativos.
La controversia que rodea a la AfD y las recientes declaraciones de Krah han puesto de relieve las tensiones existentes en la política alemana y europea. La decisión de expulsar al AfD del grupo parlamentario ID marca un hito significativo en la relación entre estos dos grupos políticos y podría tener implicaciones significativas para el futuro de la política de extrema derecha en Alemania y en el resto de Europa.
La polémica también ha sacado a la luz la cuestión de cómo se recuerda y se enfrenta el pasado nazi de Alemania en la actualidad. Las declaraciones de Krah, que parecen minimizar la culpabilidad de los miembros de las SS, han reavivado el debate sobre cómo se interpreta y se recuerda este oscuro capítulo de la historia alemana.
A pesar de la controversia, la AfD sigue siendo un actor político significativo en Alemania, y su expulsión del grupo parlamentario ID no parece haber mermado su apoyo entre un segmento de la población alemana. La reelección de Chrupalla y Weidel como colíderes del partido indica su continuo apoyo dentro de la formación.
En medio de la controversia y las protestas, la AfD se enfrenta ahora a un futuro incierto. Su expulsión del grupo parlamentario ID podría aislar aún más al partido en la política europea, y las declaraciones de Krah podrían seguir provocando críticas y protestas. Sin embargo, la reelección de sus colíderes y el apoyo continuo de sus seguidores sugieren que la AfD seguirá siendo un actor político relevante en Alemania.