La Gran Industria Española Presiona al Gobierno por Ayudas Insuficientes para Contrarrestar los Altos Costos de Electricidad
Las grandes empresas industriales en España han estado presionando al Gobierno durante mucho tiempo para aumentar las ayudas directas que sirven para mitigar el impacto de los costes de electricidad en sus cuentas y en su capacidad para competir con sus rivales en Europa. Sin embargo, estas presiones no han tenido el efecto deseado. El Ejecutivo repartirá compensaciones a los consumidores electrointensivos que están muy por debajo de las expectativas del sector.
Cada año, los grandes grupos industriales se benefician de un sistema de compensación de parte de los costes de las emisiones indirectas de CO2 que asumen en sus costes energéticos. El Consejo de Ministros ha autorizado este martes al Ministerio de Industria a lanzar la convocatoria de este año de estas ayudas por un importe de 300 millones de euros. Este importe representa un aumento del 23% en relación al repartido en los dos últimos años, con 244 millones en ambos ejercicios. Sin embargo, es apenas un tercio de la cantidad que la gran industria había estado reclamando.
La Asociación de Empresas de Gran Consumo de Energía (AEGE) había solicitado un gran aumento presupuestario para compensar los costes indirectos del CO2. Según la AEGE, el sector tiene derecho a compensaciones por un importe de 850 millones de euros este año, dado la evolución de los parámetros que se utilizan para calcular el importe máximo de las ayudas.
La Industria Solicita Más Ayuda a Medida que los Costos de Energía Aumentan
La recaudación por las subastas de derechos de emisión de CO2 ascendió el año pasado a 3.600 millones de euros. La Ley de Cambio Climático permite repartir un 25% de esos fondos entre la industria en riesgo de deslocalización y cubrir hasta un 75% de estos costes indirectos. Por esta razón, la gran industria estaba solicitando un aumento sustancial en el presupuesto para este año.
De hecho, según la AEGE, el año pasado las ayudas correspondientes a la industria habrían sido de 450 millones de euros, dados los altos precios de los derechos de emisiones de CO2 y dentro de los márgenes presupuestarios que impone la UE a este tipo de ayudas. Sin embargo, en realidad se repartieron solo 244 millones de euros.
La AEGE, que representa a una treintena de gigantes industriales como ArcelorMittal, Acerinox, Sidenor, Ferroatlántica o Tubos Reunidos, ha criticado la “insuficiente aportación presupuestaria” para compensar los costes indirectos de CO2 en comparación con sus rivales de otros países de Europa. Consideran que esta es la “principal desventaja competitiva de la gran industria electrointensiva frente a los competidores europeos”.
La industria electrointensiva advierte que el año pasado registró una caída del 8% en su consumo eléctrico, y denuncia que el descenso es del 30% en los últimos dos años, una desaceleración que las empresas atribuyen al impacto continuo de la crisis de precios energéticos. La asociación de grandes consumidores advierte que este año la gran industria española pagará la electricidad de media a casi 60 euros por megavatio hora (MWh), un 161% más que sus homólogos franceses (menos de 23 euros por MWh) y un 65% que los grupos alemanes (36 euros por MWh), considerando la evolución del precio de la electricidad en lo que va de año y de la previsión del mercado de futuros hasta final del ejercicio. AEGE alerta de que les resulta difícil competir en estas circunstancias y avisan del peligro de deslocalizaciones de grupos industriales.
El año pasado, la Comisión Europea aprobó una revisión del plan de ayudas del Gobierno español para toda una década. El plan anterior contemplaba 2.900 millones de euros para compensar parte de los costes de emisiones indirectas de CO2 entre 2021 y 2030. El nuevo programa ahora permitirá a España destinar un máximo de 8.510 millones entre 2022 y 2031. Con estos nuevos límites presupuestarios, y dada la subida de los precios del CO2, la patronal de la gran industria electrointensiva justificaba su reclamación de más que triplicar la partida de ayudas para este año.
La Industria Solicita una Reforma Total de la Fiscalidad Energética
En realidad, la gran industria española aspira a una reforma integral de la fiscalidad energética que soportan para lograr más ayudas y descuentos. AEGE ha solicitado al Ejecutivo una reducción masiva en su factura eléctrica mediante reducciones de impuestos, nuevas bonificaciones, retirada de cargos específicos y otros aspectos.
El Ministerio de Industria, dirigido por Jordi Hereu, inició un proceso de consulta pública para solicitar propuestas para reformar el Estatuto de los Consumidores Electrointensivos, que establece los requisitos para que los grandes clientes de luz accedan a determinadas bonificaciones. El objetivo principal de este procedimiento era simplificar la burocracia, reducir cargas administrativas y agilizar el procedimiento para reconocer a las grandes industrias la condición de electrointensivas, y así facilitar la entrega de las ayudas ya reconocidas.
No obstante, la patronal AEGE aprovechó este proceso de consulta pública para solicitar una reforma mucho mayor del contenido del Estatuto de los Electrointensivos y demandar mayores descuentos en su factura. Solicitaron una reforma integral del marco regulatorio de los electrointensivos para poder beneficiarse de más descuentos, pidiendo igualar sus condiciones a las de sus rivales de Francia o Alemania, dejando de pagar el impuesto sobre el valor de la producción de la energía eléctrica (IVPEE), no soportando el cargo del Fondo Nacional de Eficiencia Energética (FNEE) y aligerando otros aspectos fiscales y de los cargos por costes ligados a la política energética.