El Caja87, el nuevo club de baloncesto de Sevilla, avanza con paso firme en estas primeras semanas de vida. Desde su presentación en sociedad, un acto cargado de nostalgia y pasión por el baloncesto celebrado el pasado 15 de julio en Las Setas de la Encarnación, el equipo se ha ganado rápidamente el cariño de los aficionados al deporte de la canasta en la ciudad. Y la prueba más palpable de cómo ha calado hasta este momento se refleja en el número de abonados que ha podido reunir ya. Son unos 1.400 aproximadamente, según las cifras que maneja el club, contando también con los integrantes de las peñas. Y todo ello sin saberse todavía cómo quedará rematada la plantilla ni el lugar donde disputará sus encuentros como local.
Esa cifra de socios, que puede parecer muy pequeña si se compara evidentemente con los gigantes futbolísticos de la ciudad, es muy importante por las circunstancias señaladas. Pero también porque es un club recién nacido que parte de cero y porque, no se olvide esto tampoco, militará esta próxima temporada en la Segunda FEB, tercera categoría nacional, donde seguramente no habrá muchos equipos con esa masa social.
Nacimiento y esencia del Caja87
El nacimiento del Caja87 enriquece la oferta polideportiva y baloncestística de la ciudad con un proyecto que pretende recuperar la esencia o el espíritu del otrora Caja San Fernando y surge con una vocación integradora, sin buscar ni propiciar rivalidades. Todo lo contrario. Quiere el club llegar a todos los aficionados al baloncesto con independencia de sus colores futbolísticos. De hecho, de las siete peñas que ya tiene, alguna de ellas hará incluso doblete, apoyando tanto al equipo verdirrojo como al Real Betis Baloncesto.
En el capítulo de fichajes, el Caja87 se ha asegurado los servicios de Ken Issanza Baoko, pívot congoleño de 2,02 metros y 21 años que la pasada temporada se estrenó en Segunda FEB, en concreto en las filas del Basquet L’Horta Godella valenciano, con el que promedió 4,6 puntos y 3,6 rebotes. El africano se sumará a los ocho fichajes ya anunciados por el club hispalense. La posición de base se la repartirán Luke Moyer, Rafa Santos y Álvaro Herrera; los puestos de escolta y alero son para Nolan Bertain, Matija Bilalovic y Magnus Mollgaard; y las posiciones interiores, para Nedim Dedovic, Adrián Latorre y Baoko. En principio, la plantilla se completará con un jugador interior más y con un alero alto, seguramente un tres y medio que podría quedarse con la segunda plaza extracomunitaria. Una la ocupará Bertain mientras que Moyer, también estadounidense, tiene pasaporte italiano.
El pabellón donde jugará sus partidos como anfitrión es un asunto todavía por definirse, aunque con el número de socios alcanzados ya todo apunta a que la única solución viable, por operativa, será el pabellón del Polideportivo San Pablo. Se trata, de hecho, de la única instalación de la capital hispalense que reúne todos los requisitos exigidos por la Federación Española de Baloncesto en cuestiones logísticas, como las canastas de suelo o los marcadores.