Sin la referencia de Wall Street, que permaneció cerrado por festivo este lunes, los operadores han descontado que la inflación en Corea del Sur descendió hasta el 2% en agosto en tasa interanual, desde el anterior 2,6%, y ha marcado mínimos desde 2021. Aunque en tasa mensual, el IPC repuntó un 0,4%, ligeramente por encima del 0,3% anticipado.
«En China«, afirma Stephen Innes, gestor de SPI Asset Management, «la historia sigue siendo tan predecible como siempre: la economía necesita desesperadamente una inyección de estímulo fiscal de gran cuantía dirigida directamente a los hogares para reactivar el gasto». En su opinión, «la falta de demanda es evidente y no basta con modificar la oferta de crédito».
En este sentido, los analistas de JP Morgan han comentado que «la crisis del mercado inmobiliario aún no ha terminado«, ya que las medidas del Gobierno para solucionar este problema no han sido satisfactorias.
Movimientos en otros mercados globales
En otros mercados, el petróleo Brent cae un 0,3% ($76,47), el euro se deprecia un 0,15% ($1,1054) y la onza de oro cede un 0,05% ($2.526). Además, la rentabilidad del bono americano a 10 años repunta al 3,917%; y el bitcoin sube un 1,3% ($59.220).
La caída de la inflación en Corea del Sur a niveles no vistos desde 2021 es una señal positiva para la región, aunque el repunte mensual del IPC sugiere que aún hay presiones inflacionarias subyacentes. Este ajuste en la tasa interanual de inflación puede ser interpretado como una señal de que las políticas monetarias del Banco de Corea están comenzando a mostrar resultados, aunque los analistas seguirán atentos a los próximos datos para confirmar esta tendencia.
En China, Stephen Innes de SPI Asset Management destaca la urgencia de una inyección de estímulo fiscal que se dirija directamente a los hogares con el objetivo de reactivar el gasto. La falta de demanda es un problema estructural que no puede ser solucionado únicamente con modificaciones en la oferta de crédito. Esto se ve reflejado en la continua preocupación por la crisis del mercado inmobiliario, un área en la que JP Morgan ha señalado que las medidas gubernamentales han sido insuficientes hasta el momento.
El mercado de commodities también muestra señales de volatilidad. El petróleo Brent ha registrado una caída del 0,3%, situándose en $76,47 por barril. Este descenso puede estar influenciado por factores como la oferta global y las expectativas de demanda, que continúan ajustándose a las realidades económicas post-pandemia. El euro también ha mostrado debilidad, depreciándose un 0,15% frente al dólar, situándose en $1,1054. Esta depreciación puede estar relacionada con las perspectivas económicas de la zona euro y las políticas monetarias del Banco Central Europeo.
En el mercado de metales preciosos, la onza de oro ha cedido un 0,05%, situándose en $2.526. El oro suele actuar como un refugio seguro en tiempos de incertidumbre económica, y su leve descenso puede indicar una ligera mejora en la confianza del mercado. Sin embargo, la rentabilidad del bono americano a 10 años ha repuntado al 3,917%, lo que podría reflejar expectativas de inflación futura o ajustes en la política monetaria de la Reserva Federal.
Por otro lado, el bitcoin ha registrado una subida del 1,3%, situándose en $59.220. Este repunte puede estar relacionado con una mayor aceptación institucional y la creciente adopción de criptomonedas como una clase de activo legítima. Sin embargo, la volatilidad inherente al mercado de criptomonedas sigue siendo un factor a considerar para los inversores.
En resumen, el panorama financiero global muestra una mezcla de señales positivas y desafíos persistentes. La caída de la inflación en Corea del Sur es un desarrollo alentador, pero las preocupaciones en China y la volatilidad en los mercados de commodities y criptomonedas sugieren que los inversores deben mantenerse vigilantes. La necesidad de estímulo fiscal en China y la crisis del mercado inmobiliario son áreas clave que los analistas seguirán monitoreando de cerca.
Para obtener más información sobre la situación económica en China y sus implicaciones para los mercados globales, puedes visitar The Economist.
¿Cómo afectarán estos desarrollos recientes a las estrategias de inversión a corto y largo plazo?