Un perro juega con el agua.

El verano y sus desafíos para nuestras mascotas: cómo cuidar de ellas durante las olas de calor

A medida que los termómetros comienzan a dispararse en muchos lugares de España, es fundamental recordar que nuestras mascotas también sufren las consecuencias del calor asfixiante del verano. A pesar de que estamos a mitad del verano, la probabilidad de experimentar temperaturas extremas y olas de calor asfixiantes es aún alta. Estos picos de calor no solo hacen sufrir a las personas, sino también a los animales, especialmente a aquellos con pelaje, como perros y gatos.

El pelo de estos animales, aunque protege del frío en invierno y del sol en verano, también puede aportar uno o dos grados extra de calor, lo que aumenta el riesgo de sufrir un golpe de calor. Para mantener a nuestras mascotas frescas y saludables durante el verano, existen varias medidas que podemos tomar.

La importancia del cepillado y el aire acondicionado

Una de las maneras más sencillas de proteger a nuestras mascotas es cepillar su pelo a diario. El cepillado diario mantiene el manto protector del animal aireado y fresco, previniendo así el golpe de calor. Si disponemos de aire acondicionado en casa, es recomendable dejarlo encendido cuando el animal se quede solo, o en su defecto, un ventilador activado cada hora o cada hora y media para que el perro pueda refrescarse durante el día.

Además, es importante evitar sacar a pasear a los perros durante las horas pico de calor, ya que el asfalto puede alcanzar temperaturas muy altas y lastimar las almohadillas plantares de nuestros amigos peludos. Los expertos recomiendan la ‘regla de cinco segundos’: si puedes mantener la palma de tu mano en el asfalto durante cinco segundos sin sentir demasiado calor, entonces es seguro para tu perro caminar sobre él.

Buscando la frescura en playas y piscinas

Las playas son una excelente opción para refrescar a nuestras mascotas si tenemos acceso a ellas. En Cataluña, por ejemplo, existen más de una veintena de lugares donde los perros tienen su propio espacio para disfrutar del agua.

Para aquellos que no tienen acceso a una playa, siempre es posible hacer que los días de calor en la ciudad sean más frescos y agradables para nuestras mascotas utilizando diferentes objetos. Por ejemplo, una piscina inflable en el jardín o en el patio puede ser una gran manera de ayudar a nuestros perros a soportar las altas temperaturas.

Productos refrescantes para mascotas

Existen diversos productos en el mercado diseñados para ayudar a nuestras mascotas a mantenerse frescas durante el verano. Las alfombras, mantas y esterillas refrigerantes son una opción popular. Estas contienen geles que se enfrían con el peso del perro y se recargan automáticamente después de un tiempo sin uso.

También existen chalecos refrescantes que funcionan de manera similar: se sumergen en agua fría durante unos minutos y luego se colocan en el perro, proporcionando frescura durante varios días.

Además, hay bandanas refrescantes rellenas de gel que se anudan al cuello del animal como un collar. El gel se activa al entrar en contacto con la piel del animal y se recarga de forma natural después de un tiempo sin uso.

Por último, una opción deliciosa y refrescante para nuestras mascotas son los helados para perros. Estos pueden adquirirse en tiendas especializadas o hacerse en casa con recetas a base de leche y frutas.

Los veranos pueden ser duros para nuestras mascotas, pero con los cuidados adecuados, podemos asegurarnos de que estén frescas y a gusto durante esta temporada.

¿Y tú, qué estrategias utilizas para mantener a tu mascota fresca y cómoda durante el verano? ¿Has probado algunos de los productos refrescantes que mencionamos? Nos encantaría conocer tus experiencias y consejos.