Pere Viñolas y Juan José Brugera, consejero delegado y presidente, respectivamente, de Colonial

Colonial, una prominente inmobiliaria en el Ibex-35, ajusta el valor de sus activos en respuesta a los tipos de interés actuales. La valoración de sus inmuebles se ha visto reducida en 1.157 millones de euros, un 9% menos que en el año anterior. Esto lleva el total de la cartera de edificios de la compañía a 11.336 millones de euros, una cifra que se reduce a 5.372 millones de euros si se descuenta la deuda de la empresa.

A pesar de la caída en valoración, que ha generado pérdidas netas en el ejercicio de 2023 de 1.019 millones de euros, este resultado negativo a nivel contable no tiene impacto en la operativa o en el flujo de caja de Colonial. La inmobiliaria ha logrado el mejor beneficio recurrente de su historia, 172 millones de euros, y tiene planes de incrementar su dividendo en un 8%, lo que lleva el total a 144 millones de euros.

Bajo la dirección de Juan José Brugera y Pere Viñolas, Colonial ha reportado ingresos por alquileres de 377 millones de euros en los últimos doce meses, un incremento del 8%. Viñolas describe el año como «excelente» desde el punto de vista operativo en la compañía, en un entorno de ajuste con la evolución de los mercados. El aumento de las rentas ha permitido a Colonial mitigar, en cierta medida, el impacto en la valoración de su cartera.

En términos de alquiler de oficinas, Colonial ha cerrado contratos por una superficie acumulada de más de 158.000 metros cuadrados en el último año. Viñolas explica que el ritmo normal de la compañía es firmar contratos por 100.000 metros cuadrados en un año, y señala que la cifra de 2023 es una de las tres mejores en la historia de Colonial.

La ocupación de la cartera de Colonial se sitúa en el 97% de todos los metros cuadrados disponibles. Por ciudades, alcanza la plena ocupación, con el 100% de los metros cuadrados arrendados, en París, el 96% en Madrid y el 84% en Barcelona.

Para rebajar su apalancamiento y mejorar la situación de su balance, Colonial llevó a cabo numerosas desinversiones en 2023. Vendió tres edificios en el centro de Madrid al empresario Rafael González-Vallinas por 300 millones de euros, además de pequeños inmuebles en zonas más periféricas. En total, la compañía ha vendido 700 millones en activos y planea ejecutar otro plan de ventas por otros 500 millones.

En el futuro, Colonial está considerando varias reconversiones de edificios. El primero fue el complejo de usos mixtos Madnum, en la zona madrileña de Méndez Álvaro, mientras que el segundo es la reconversión de la antigua sede de T-Systems en Barcelona en un hospital. También se está considerando la reconversión de la antigua sede de IBM en Madrid a residencial.

En 2017, Colonial fue una de las empresas catalanas que, tras el referéndum de independencia del 1 de octubre, trasladó su sede a Madrid. A principios de este año, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, anunció su intención de lanzar un plan de incentivos para que aquellas compañías que mudaron su cuartel general puedan volver. Brugera confirmó que la compañía está a la espera de que se publique la disposición, la cual «estudiarán atentamente«. Con estas palabras, el presidente abre la puerta a un hipotético regreso de la sede de Colonial a Barcelona.

Por Daniel