Aficionados del Real Club Deportivo Mallorca se fotografían este jueves en La Encarnación.

El fin de semana en Sevilla se prepara para vestirse de gala en un nuevo evento deportivo de gran magnitud, la final de la Copa del Rey. Los equipos finalistas, el Athletic de Bilbao y Mallorca, se espera que atraigan a más de 100.000 aficionados a la ciudad, según las últimas estimaciones.

En respuesta a la afluencia masiva, la Subdelegación de Gobierno en Sevilla ha anunciado que se desplegarán 1.843 efectivos entre Guardia Civil y Policía Nacional y Local para garantizar la seguridad ciudadana. Esta importante medida de seguridad se tomó tras la reunión mantenida con el Ayuntamiento de Sevilla, el municipio de Santiponce y los responsables de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado.

El operativo de seguridad comenzará este viernes a las 08:00 y se extenderá hasta el domingo a las 14:00. Contará con 1.511 funcionarios de la Policía Nacional y con 132 de la Guardia Civil, quienes prestarán servicio en distintas especialidades del Cuerpo.

Además, habrá 200 policías locales dedicados a este evento deportivo, lo que supone que alrededor del 20% de la plantilla actual se destinará a esta cobertura. A ellos se sumarán cerca de 700 auxiliares de seguridad privada para reforzar la presencia policial.

Las zonas de concentración de los aficionados, conocidas como las ‘fan zone‘, serán dos de los principales puntos de despliegue de agentes. La fan zone del Athletic estará situada junto a la Torre Sevilla, y la de los aficionados del Mallorca en el parque del Alamillo. También se desplegarán efectivos en los hoteles de concentración de los equipos, el cuerpo arbitral, el estadio y sus alrededores.

Sin embargo, el alcalde de Sevilla, José Luis Sanz, ha señalado que la Plaza de España será otro punto de atención: «Vamos a intentar que las aficiones no utilicen como botellódromo la Plaza de España, que es una prioridad para este equipo de gobierno».

La seguridad no se limitará a estos lugares. Francisco Toscano, subdelegado del gobierno en Sevilla, señaló que la seguridad estará presente en distintos puntos de la ciudad donde pueda haber aficionados, para evitar altercados similares a los que se produjeron el año pasado con las aficiones de Real Madrid y Osasuna en la zona de la Alameda.

Comparado con la final de la Copa del Rey de 2023, en la que participaron 1.788 agentes de seguridad, este año el despliegue será mayor, especialmente por la gran cantidad de seguidores del Athletic de Bilbao, de los que se esperan más de 40.000.

En la final de 2023, que enfrentó al Real Madrid y Osasuna, se contó con 230 agentes de la Policía Local de Sevilla, 30 más que este año, y 1.389 policías nacionales, 122 menos que para esta final. En cuanto a la Guardia Civil, este año habrá algunos agentes menos en el terreno.

El subdelegado del gobierno en Sevilla ha pedido a ambas aficiones «disfrutar de una final de esta magnitud». Y a los sevillanos, «que volvamos a ser ejemplo de cómo se organizan este tipo de eventos», concluyó Francisco Toscano.