Sanidade afea la «inacción» del Ministerio ante la falta de médicos

La falta de profesionales sanitarios durante el verano preocupa a las autoridades gallegas

El Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud (CISNS), que tuvo lugar el miércoles pasado, fue calificado como «decepcionante» por el conselleiro de Sanidade, Antonio Gómez Caamaño. La falta de acción del Ministerio de Sanidad para solucionar la carencia de profesionales sanitarios en todas las comunidades durante el verano fue el principal motivo de su crítica.

El presidente autonómico, Alfonso Rueda, compartió las preocupaciones de Caamaño y lamentó la falta de colaboración del Gobierno para abordar esta escasez de facultativos en la Atención Primaria. Ante esta situación, la Xunta ha anunciado que implementará medidas como permitir que los MIR de último año presten apoyo de forma voluntaria y bajo supervisión, y la creación de un grupo de médicos que puedan desplazarse a las zonas con posible falta de personal o tensiones puntuales.

«El enroque del Ministerio [de Sanidad] en este tema es brutal», afirmó Caamaño a los medios de comunicación después de la visita a las obras del Hospital Novo Montecelo de Pontevedra. Criticó la parálisis permanente, la dejadez de funciones y la inacción del Ministerio, afirmando que, aunque ya sabe que no van a resolver el problema de la escasez de facultativos en verano, al menos el Gobierno central debería establecer las bases para que la planificación a medio plazo sea posible.

Frustración ante la inacción del Ministerio de Sanidad

De acuerdo con lo informado por Caamaño después del Consejo, el Gobierno no atendió a la petición de las comunidades de anticipar la finalización del período formativo de los residentes de último año que comenzaron el MIR en septiembre de 2020 debido a la pandemia. Esto se traduce en la imposibilidad de contratar a 127 nuevos médicos de familia y 26 pediatras este verano. «Nosotros tenemos una responsabilidad en planificación y gestión», reconoció Caamaño, agregando que actualmente se está trabajando en un plan para los próximos meses estivales, mientras que el ministerio no propone ninguna solución.

Entre las solicitudes formuladas por la Comunidad estaban agilizar la homologación de títulos, modificar el sistema de selección de plazas MIR para que no queden vacantes en medicina de familia y poner en funcionamiento la especialidad de urgencias, todas ellas competencia estatal. «Cada uno tiene sus responsabilidades, y parece que el Ministerio de Sanidad no se mueve», aseveró Caamaño.

Ante la inacción del Ministerio, la Consellería ha informado que están tomando medidas para ofrecer soluciones a esta problemática. Estas incluyen la posibilidad de que los MIR de último año apoyen de forma voluntaria, remunerada y bajo supervisión las urgencias y la atención primaria. También habrá un grupo de médicos disponibles para desplazarse a zonas donde haya falta de facultativos y la Xunta está analizando la posibilidad de que médicos que tengan una segunda residencia en zonas de costa, con mayor demanda asistencial en verano, puedan elegir trabajar allí temporalmente.

Las medidas propuestas por la Xunta han sido criticadas por los socialistas, que acusan a la administración de falta de planificación y de evadir su responsabilidad ante esta problemática. Rueda refutó estas críticas subrayando que la tensión del sistema sanitario en verano es común a todas las comunidades, independientemente de su color político. «No se entiende la cerrazón del ministerio, sinceramente. Hay cosas que no podemos hacer nosotros» aseguró Rueda, enfatizando que todo lo que se puede hacer desde una comunidad autónoma, para suplir esta falta de médicos, se está haciendo en Galicia. «Todas las fórmulas que estén en nuestra mano las vamos a plantear y a poner a funcionar», concluyó.