Más de 5.000 personas recorren el centro de Málaga para defender el acceso a la vivienda

Miles de Malagueños Protestan Exigiendo Derecho a una Vivienda Digna

El pasado 29 de junio, Málaga fue testigo de una movilización social masiva. Bajo el lema ‘Málaga para vivir, no para sobrevivir’, alrededor de 5.500 personas se congregaron en el centro de la ciudad para reivindicar el derecho a una vivienda digna. El evento fue organizado por el Sindicato de Inquilinos e Inquilinas, y recibió el respaldo de alrededor de cincuenta colectivos sociales y profesionales, incluyendo a Greenpeace y Médicos del Mundo.

La marcha se inició en la Plaza de la Merced y se trazó a través del centro histórico de la ciudad. Los manifestantes denunciaron que habían sido expulsados de esta zona, que según ellos se ha convertido en un ‘parque temático’ para visitantes y especulación inmobiliaria.

La Crisis Habitacional en Málaga

Los manifestantes exigieron medidas urgentes para garantizar un acceso razonable y digno a la vivienda en Málaga. Aseguran que la crisis de vivienda afecta a ciudadanos de todas las generaciones y estratos socioeconómicos. El crecimiento del número de viviendas turísticas, argumentan, no sólo obstaculiza planes de vida y mina la economía de las familias, sino que también expulsa a los malagueños de su propia ciudad o dificulta su regreso.

Las pancartas de los manifestantes reflejaban su frustración. «Mis padres a los 26 tenían un piso, yo a los 30 tengo derecho a una balda de nevera», decía una. Otras proclamaban: «las mujeres facturan, pero no pueden pagar un piso en Huelin»; «el turismo o la vida»; «menos nómada digital y más apoyo vecinal»; y «un turista más, una vecina menos».

La protesta contó con la participación de líderes políticos como Ione Belarra, secretaria general de Podemos, y Daniel Pérez, secretario provincial del PSOE de Málaga. También estuvieron presentes Toni Morillas, coordinadora general de IU y concejal en la capital, y su homólogo en Andalucía, Toni Valero.

Los organizadores de la marcha denunciaron que la turistificación y el modelo de ciudad basado en el ‘rentismo carroñero’ son factores clave en la crisis de vivienda actual. Propusieron medidas como la despenalización de la ocupación para abordar el problema, una propuesta que el alcalde, Francisco de la Torre (PP), considera incompatible con la hoja de ruta del gobierno local y que atenta contra un derecho irrenunciable, la propiedad privada.

Un incidente tenso, aunque sin violencia, ocurrió al inicio de la manifestación cuando el colectivo ultra Málaga 1487 irrumpió con proclamas como «viviendas sociales para los nacionales». Los asistentes a la protesta respondieron con el grito de «fuera fascistas de nuestros barrios».

La marcha concluyó en la Plaza de la Constitución, donde se leyó un manifiesto acusando a las autoridades de planificar un modelo de ciudad que «expulsa a sus vecinos». La lucha por el derecho a una vivienda digna en Málaga, como en muchas otras ciudades, sigue siendo una cuestión pendiente.