Simulacro de Emergencias en Málaga: Capacitación en Zonas de Guerra para Mejorar la Respuesta a Situaciones Límites
Málaga se transformó en un campo de entrenamiento de gran envergadura el viernes pasado, convirtiéndose en una zona de guerra para calibrar las respuestas a situaciones extremas. Diversos equipos de emergencia afinaron sus tiempos de reacción y sus protocolos de actuación en doce escenarios simultáneos.
En uno de los escenarios, una cooperante en una zona llana y algo montañosa, pide ayuda. Entran en escena dos pelotones de la Legión. Primero, se despliega un grupo táctico que responde al fuego enemigo y asegura la zona para que un equipo médico pueda evacuar a la cooperante con un vehículo autónomo.
Después de la evacuación inicial, la cooperante es llevada a un lugar seguro, escoltada por los militares. Entonces, aterriza un helicóptero superpuma para transportarla al hospital más cercano, en colaboración con el Ejército del Aire.
Formación en Situaciones de Emergencias
Pero ese no fue el único escenario vivido en Málaga. Se crearon situaciones de accidentes con riesgo químico, en las que había que actuar contra vertidos y gases. Se simuló un incendio que requería una respuesta rápida para evitar su propagación y varios accidentes de tráfico, como una mujer atrapada en un coche.
Se recreó un accidente de avioneta con múltiples víctimas. Los perros de la Unidad Militar de Emergencias (UME) que buscan vida, trataban de localizar a los supervivientes. Esta amplia participación llegó hasta el punto de simular un secuestro con rehenes, que sirvió de examen para los alumnos de uno de los másteres de la Cátedra Estratégica de Seguridad, Emergencias y Catástrofes.
En un túnel junto al metro, había gente atrapada que había que rescatar, así como la que estaba oculta en una especie de pozo en la zona. La Policía Científica acordonaba la zona en otro de los escenarios tras la aparición de varios cadáveres y restos humanos. Incluso, se contó con la participación de un grupo de psicólogas de guerra en el ejercicio.
Este simulacro marcó el final de las jornadas sobre Seguridad, Emergencias y Catástrofes celebradas en el Instituto de Investigaciones de la UMA. Ocupó el segundo día, después de que se sucedieran las mesas redondas y la exposición de medios para este tipo de intervenciones. Participaron grupos de especialistas del Consorcio de Bomberos de Málaga, de la Guardia Civil y de la Policía Nacional.
El ejercicio de simulacro fue un esfuerzo coordinado para mejorar las respuestas de emergencia a diversas situaciones, desde accidentes de tráfico y desastres químicos hasta secuestros y escenarios de guerra. La preparación y la formación continua son esenciales para asegurar que, en caso de emergencia, los equipos de rescate estén listos para responder y salvar vidas.