El paisaje del fútbol sala español está cambiando, con un soplo de aire fresco que ha transformado el juego que, durante décadas, estuvo dominado por equipos como Movistar Inter, ElPozo Murcia y Barcelona. Ahora, los equipos que antes estaban en la sombra, como Jaén Paraíso Interior, UMA Antequera, Betis y Jimbee Cartagena, están subiendo al podio y levantando los trofeos que antes eran el territorio exclusivo de estos grandes equipos.
El cambio más reciente ha sido el del equipo de Cartagena, que ha ganado una liga que, durante las últimas veintidós temporadas, siempre había estado en manos de equipos de Madrid, Murcia y Cataluña. Este es un logro histórico para el club, que estuvo muy cerca de ganar el título en 2006 cuando era conocido como Polaris World Cartagena. A pesar de enfrentar la adversidad, el club ha conseguido el título en un estilo épico, solo unos meses después de ganar la Supercopa de España.
Duda lleva a Cartagena a la cima
El equipo, dirigido por el brasileño Duda, que ha adoptado Murcia como su hogar, se ha convertido en el primer equipo en la historia del fútbol sala español en ganar el título de la liga después de terminar la fase regular en la quinta posición. Este logro es aún más impresionante considerando que tuvieron que enfrentarse a tres eliminatorias de playoff consecutivas sin tener la ventaja de jugar en casa.
A pesar de estos obstáculos, el equipo de Cartagena nunca se amedrentó, incluso cuando se enfrentaron a equipos de la talla de Movistar Inter, Barcelona y ElPozo en su camino al título. Vencieron a los equipos de Madrid y Cataluña de manera convincente, mientras que cedieron un punto en la final al mejor de cinco partidos contra ElPozo tras perder en el tercer partido en penaltis.
Para entender la magnitud de la victoria de Jimbee Cartagena, es importante destacar que sus rivales en los cuartos de final, semifinales y finales son los tres equipos que habían ganado las últimas 22 ligas: Movistar Inter había ganado once, ElPozo Murcia cuatro y Barcelona siete.
La dificultad de ganar este trofeo en España es tal que, además de estos tres grandes equipos, solo siete equipos más lo habían logrado en su historia: Playas de Castellón (2 veces), Castilla la Mancha Talavera, Caja Segovia, Pinturas Lepanto Zaragoza, Maspalomas Sol de Europa, Pennzoil Marsanz y Caja Toledo. Ahora, Jimbee Cartagena se ha unido a este selecto club.
Otros equipos que lograron hacer caer a los grandes, como el extinto Lobelle de Santiago, Jaén Paraíso Interior, UMA Antequera o Betis lo hicieron en otros torneos como la Copa de España, la Copa del Rey o la Supercopa de España, pero no en la Liga con su sistema de playoff por el título y eliminatorias al mejor de 3 o 5 encuentros.
El principal protagonista de este proyecto es Miguel Ángel Jiménez, dueño de Jimbo Fresh, que en 2018 cambió su papel de patrocinador por el de presidente y apostó por instalar al Cartagena entre los grandes del fútbol sala español.
Desde el primer momento, Jiménez firmó jugadores importantes. Pero la guinda la puso con la contratación de Eduardo Sao Thiago, Duda, para el banquillo.
El único lunar que se le puede achacar este año al equipo cartagenero es la temprana eliminación en la Copa de España, donde además era anfitrión. A los de Duda les pesó la maldición del organizador y cayeron en un disputado enfrentamiento de cuartos precisamente contra ElPozo.
Gracias a este título liguero, el Jimbee Cartagena representará al fútbol sala español por primera vez en la Champions. Un papel que compartirá con la otra gran irrupción del fútbol sala español, el Mallorca Palma Futsal, que si bien aún no ha ganado un título nacional se ha proclamado campeón de Europa los dos últimos años. Será la segunda edición de la Champions, desde la primera que se disputó en la campaña 2001-02, en la que no estarán Movistar Inter, ElPozo Murcia o Barcelona. La alternativa a los grandes ya es un hecho, y no hay mejor noticia para el fútbol sala español.