Desde febrero de 2020 los españoles que han comprado o intentado obtener una casa fué medrando paulativamente hasta lograr el 15% en el último año. No obstante, en comparación con hace un par de años ha decrecido el porcentaje de españoles que oferta vivienda, que pasó del 5% en 2022 al 4% este año.
Estos datos se reflejan en el informe “Experiencia en compraventa en 2022”, efectuado por Fotocasa Research con la intención de saber de primera mano de qué manera está el mercado de la compraventa en España. La manera más óptima de ver la intensidad de este cambio es estimar al mercado de compraventa como un todo. Así, lo que se aprecia es que, del 100% de particulares que participaron en el mercado de compraventa, un 77% se relaciona de forma exclusiva con la adquisición de vivienda y un 15% con la venta.
Aparte de estos 2 conjuntos, hay un pequeño segmento de particulares que participa simultáneamente en los dos lados del mercado. Son, en concreto, un 8% los que aseguran que en el último año realizaron acciones tanto de compra como de venta. María Matos, directiva de Estudios y representante de Fotocasa, dice que «la oferta de vivienda a la venta fué reduciéndose pausadamente a lo largo de los últimos tiempos pero con un cambio importante: en el segundo semestre de 2021 incrementa en mucho más de un punto porcentual gracias a la vivienda que se traspasa del mercado del alquiler al de la adquisición», lo que transporta a que se acreciente la oferta «que asiste para sostener la senda de desarrollo permanente del precio, aún con la una gran diferencia entre oferta y demanda».
Además de esto, asimismo afirma que la demanda «jamás había anunciado escenarios tan voluminosos, coincidiendo con el despertar del interés por obtener tras el confinamiento de 2020«, pero la subida de los modelos de interés «empieza a ralentizar la demanda de vivienda«. Matos opina que, si la inclinación sigue de esta forma «en 2023 el valor podría enseñar cambios hacia la baja”.
Entre las claves del mercado de la compraventa es ver de qué forma va evolucionando la adquisición eficaz de vivienda, esto es, los que sí que terminan comprando. De esta manera, en 2022 un 4% de españoles que procuraban vivienda para obtener lograron cerrar la transacción de forma exitosa, un porcentaje que es un punto inferior al detectado en 2021 pero 2 puntos superior al detectado en 2020.
No obstante, el porcentaje de personas que han intentado obtener, pero no lo consiguieron se ha achicado sensiblemente en el mes de agosto de 2022 (11%) respecto al mes de febrero de 2022 (13%),y es la causa del rápido descenso del grupo del mercado. Este apunte, si se equipara con el de periodos precedentes, todavía es algo mucho más prominente: en el mes de febrero de 2020 eran un 10% los usuarios inefectivos y un año después, en el mes de febrero de 2021, eran un 9%, un número de manera significativa mucho más baja que la presente.
Por otro lado, si se coge el grupo de demandantes de vivienda en la segunda una parte del año 2022 se ve de qué forma la demanda de compra fué descendiendo de a poco y la de alquiler fué ganando lote. De esta forma, en la segunda mitad de 2022 el 46% de la demanda de vivienda fué para alquiler y el 44% fué demanda de compra. Estas cantidades suponen un cambio drástico respecto a principios de 2022 y hace ocultar prácticamente completamente la brecha entre la demanda de compra y de alquiler.
Si en el mes de febrero de 2022 12 puntos porcentuales apartaban a los dos conjuntos, en este momento esa diferencia es de solo 2 puntos porcentuales. Esto se origina por que, por una parte, los demandantes de vivienda de alquiler pasó del 38% en el mes de febrero al 46% de agosto y, por otra parte, a que los demandantes de casa en propiedad han caído hasta el 44%, en oposición al 50% de febrero.
El empuje de la demanda de compra, que venía ganando lote en los últimos tiempos a la demanda de alquiler, semeja haberse frenado a lo largo del 2022 tras el incremento de los costos hipotecarios, que empezó a hacerse ver en el mercado inmobiliario. Y, aparte de estos 2 enormes conjuntos, queda un tercer segmento que, no por ser mucho más pequeño, es menos importante. Hablamos de esos demandantes que procuran tanto casas de alquiler como de compra. Es un segmento que tiende a mantenerse permanente en todo el tiempo y con variantes muy moderadas.