Le caen 22 años de cárcel por agredir sexualmente a su hija desde los ocho a los 14 años en Málaga

Condenado a más de 22 años de prisión un hombre por abuso sexual continuado a su hija

La Audiencia de Málaga ha sentenciado a un hombre a 22 años y nueve meses de prisión por cometer abusos sexuales y agresiones físicas contra su hija durante un periodo de seis años, comenzando cuando la niña tenía solo ocho años. Además, el tribunal ha impuesto una indemnización de 50.000 euros a la víctima por los daños físicos y morales sufridos.

Según la sentencia, el hombre llevó a cabo tocamientos inapropiados y mantuvo relaciones sexuales con su hija desde el año 2016 hasta 2022, cuando la niña tenía 14 años. Durante el juicio, el acusado admitió haber realizado tocamientos a su hija.

No obstante, la Sala ha declarado que, la prueba practicada demostró que los tocamientos se produjeron de forma habitual y reiterada entre los años 2016 y 2021, y que el acusado utilizó la fuerza en varias ocasiones debido a su mayor tamaño físico en comparación con la niña.

Intimidación y amenazas como método de control

En la última etapa del abuso, en 2021, el acusado recurrió a la intimidación y las amenazas para obligar a su hija a someterse a estos actos, amenazándola con hacerle daño al chico con el que había comenzado a salir.

En todo momento, la víctima mostró su oposición, desagrado y asco hacia el comportamiento de su padre, quien la recriminó por tener relaciones con su novio y la agredió sexualmente en varios lugares, incluyendo un descampado, dentro de una furgoneta, en un trastero y en el cuarto de contadores.

Como resultado de estos actos atroces, la niña sufrió varios problemas físicos y psicológicos, incluyendo alteraciones en el sueño, disminución en su rendimiento escolar y problemas para asimilar una comprensión normalizada de las relaciones sexuales.

El Tribunal logró probar estos hechos no solo a través de la declaración de la víctima, sino también a través de las declaraciones de testigos, investigadores y el propio acusado, quien admitió haber «tocado» a su hija cuando tenía 13 y 14 años, pero negó las agresiones sexuales.

Debido a esto, la Audiencia condena al acusado a 22 años y nueve meses de prisión por un delito de abusos sexuales y otro de agresión sexual, ambos de carácter continuado. No obstante, la sala señala que según el Código Penal, el tiempo máximo de cumplimiento efectivo no podrá exceder de 20 años.

Además, se le prohíbe acercarse a la víctima a menos de 250 metros o comunicarse con ella por cualquier medio durante un periodo de 25 años, así como la privación de la patria potestad en relación con dicha menor y libertad vigilada, que implica un alejamiento similar por otros 25 años.

En términos de responsabilidad civil, se le condena a indemnizar a la víctima con la cantidad total de 50.000 euros por los daños morales y secuelas psicológicas que le causó.