El paisaje industrial europeo está siendo sacudido por un agitado proceso de adquisición. La catalana Ercros, una de las empresas con el capital más atomizado de la Bolsa española, se ha convertido en el codiciado premio de una contienda que enfrenta a dos potentes grupos industriales: el portugués Bondalti y el italiano Esseco.
Bondalti, la filial del grupo luso José de Mello, inició la batalla al lanzar una oferta pública de adquisición (OPA) el pasado 5 de marzo. Ofreció 329 millones de euros por el 100% de las acciones de Ercros, un movimiento que fue bien recibido por la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). El regulador admitió a trámite la oferta, considerando que se ajustaba a la ley de OPAs y que cumplía con los requisitos del Real Decreto sobre el régimen de las ofertas públicas de adquisición de valores.
El Gobierno también dio su aprobación al proceso de adquisición el pasado 12 de junio, indicando que la oferta de Bondalti no requería la autorización de la Comisión Europea. Parecía que el camino estaba despejado para la toma de control de la química catalana por parte de la firma portuguesa.
La irrupción de Esseco
Sin embargo, la irrupción del grupo industrial italiano Esseco ha añadido una vuelta de tuerca a este proceso. Esseco, fabricante de cloro y otros productos químicos formulados a base de azufre, lanzó una contraoferta que valora a Ercros en 351 millones de euros, un 6,6% por encima de la oferta de Bondalti. La CNMV, a la luz de esta nueva oferta, decidió suspender la tramitación de la OPA lanzada por Esseco, a la espera de tomar una decisión sobre la oferta de Bondalti.
La CNMV recuerda que este es un procedimiento habitual en los mercados. De acuerdo con la ley de OPAs, cuando en un proceso de adquisición aparece un nuevo actor, la CNMV suspende la tramitación del segundo postor hasta resolver la primera oferta.
El papel del regulador en este proceso es crucial. Puede autorizar la OPA en un plazo de 20 días hábiles desde que recibe la solicitud de autorización del oferente, pero también puede prorrogar este plazo de manera indefinida. Esta decisión está pendiente y es lo que actualmente está bloqueando la tramitación de la oferta de Esseco.
Rodrigo Buenventura, presidente de la CNMV, ha destacado que la admisión a trámite de la OPA de Bondalti no supone un pronunciamiento sobre la resolución relativa a la autorización de la oferta, o cualquiera de sus términos y condiciones. Esto deberá producirse conforme a los plazos y demás requisitos previstos en la normativa.
¿Guerra de OPAs?
Es pronto para determinar si este proceso de adquisición de Ercros podría derivar en una guerra de OPAs entre Esseco y Bondalti. Sin embargo, los accionistas de Ercros han mostrado su insatisfacción con las ofertas actuales. En la reciente junta de accionistas, Víctor Manuel Rodríguez, abogado y principal accionista de la compañía, recordó que los accionistas tienen la opción de votar en contra de ambas ofertas.
Antonio Zabalza, presidente de Ercros, evitó dar su opinión sobre el precio de las ofertas, pero destacó que la existencia de ofertas competidoras es un indicativo del alto valor del grupo. Subrayó que el consejo de la empresa, junto con sus asesores legales y financieros, está buscando más ofertas para intentar aumentar el precio de venta de la compañía.
En cuanto al soporte que cada oferente está recibiendo, es notable que cada grupo ha reunido a un equipo de asesores de alto perfil. Ercros cuenta con el asesoramiento legal de Uría y el financiero de Evercon. Bondalti ha contratado los servicios legales de Cuatrecasas y ha asegurado la financiación de la OPA a través del Banco Santander. Esseco, por su parte, ha fichado a Pérez-Llorca y cuenta con JP Morgan como asesor financiero.
En resumen, el proceso de adquisición de Ercros se presenta repleto de giros y vueltas. La guerra de OPAs podría estar a la vuelta de la esquina, y los accionistas de Ercros se encontrarán en la primera línea de esta batalla por el control de una de las empresas más valiosas de la Bolsa española.
