Oficinas del Banco Sabadell en San Cugat del Vallés (Barcelona).

El escenario financiero español está presenciando una posible reconfiguración con las recientes discusiones sobre la fusión entre BBVA y Banco Sabadell. En un comunicado a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), el BBVA, presidido por Carlos Torres, confirmó contactos con su homólogo en Sabadell, Josep Oliu, para explorar las posibilidades de la referida fusión.

Este no es un nuevo desarrollo, ya que las conversaciones sobre la fusión han surgido en el pasado. Sin embargo, la situación ha cambiado drásticamente desde entonces. Desde el 27 de noviembre de 2020, cuando las últimas negociaciones se rompieron, los títulos de Sabadell han crecido en la bolsa un impresionante 364%, mientras que los del BBVA han subido un 167,5%. En términos de valor, el banco presidido por Oliu vale hoy casi cuatro veces más que hace cuatro años.

Los analistas ven el potencial de esta fusión como una oportunidad para que el BBVA aumente su presencia en España. Según Antonio Castelo, analista de iBroker, los detalles de la operación aún están por definirse, pero es indiscutible que la fusión fortalecería la posición del BBVA en el mercado español.

El BBVA, que cuenta con más de 801.700 millones de activos repartidos en más de 25 países, tiene una fuerte presencia en México y España. El analista de XTB, Joaquín Robles, señala que aunque la noticia fue una sorpresa, pone de manifiesto las dificultades de las entidades bancarias para crecer. Según Robles, a medida que los márgenes de interés caigan debido a la relajación de los tipos de interés, los ingresos disminuirán y las fusiones podrían ser una forma de mantener el crecimiento.

Las fusiones bancarias se volvieron más complicadas después de la crisis de 2008 y el fin de las cajas de ahorro. Sin embargo, la operación propuesta entre el BBVA y el Sabadell se remonta a hace solo unos años. En ese momento, se especuló que el BBVA podría adquirir el Sabadell, que estaba luchando con pérdidas y se consideraba que tenía una exposición excesiva a las pymes.

Hoy, la situación es muy diferente. El Sabadell anunció recientemente beneficios de 308 millones de euros entre enero y marzo de 2024, un incremento del 50,4% respecto al año anterior. Además, la entidad prevé superar los 1.332 millones de euros obtenidos en 2023, lo que sería el mayor beneficio desde su fundación en 1881. Por su parte, el BBVA reportó ganancias de 2.200 millones de euros en el primer trimestre del año, un incremento del 19,1% en comparación con el mismo periodo del año pasado.

Las últimas negociaciones entre las dos entidades finalizaron el 27 de noviembre de 2020 sin llegar a un acuerdo. El Sabadell esperaba obtener una prima del 30% sobre el valor de sus acciones, pero la oferta del BBVA no cumplió con esta expectativa. También hubo desacuerdos sobre el reparto de los principales cargos del banco resultante de la fusión.

Se esperaba que ambos consejos de administración aprobaran la operación en diciembre de 2020. La fusión contaba con el apoyo del Gobierno y el Banco de España, y se alineaba con el objetivo del Banco Central Europeo (BCE) de fomentar una mayor concentración bancaria en la eurozona para fortalecer a las entidades bancarias y aumentar su rentabilidad ante la crisis del coronavirus.

Por Daniel