El sábado pasado, la ciudad de Alcoy fue el escenario de un deslumbrante espectáculo que atrajo a una multitud de espectadores. El Desfile de las Entradas, el acto más esperado de la trilogía de sus Moros y Cristianos, contó con la participación de más de 15,000 personas que ofrecieron un magnífico espectáculo callejero.
Este evento, que se celebra anualmente, se reinventa cada año para presentar nuevos trajes, boatos y ballets. Fue uno de los días más importantes de las fiestas de la ciudad, que han sido declaradas de Interés Turístico Internacional. Los espectadores llenaron las calles de Alcoy al ritmo de los pasodobles, creando un ambiente de música, color y emoción.
El desfile se dividió en dos partes: la Entrada Cristiana y la Entrada Mora. La primera, que comenzó a las 10:30 de la mañana, rememora la concentración de fuerzas cristianas en defensa de la entonces Villa de Alcoy. Participaron 16 ‘filaes’ o grupos de desfile, cada uno con sus propios trajes y bailes. Por la tarde, a las 17:00, comenzó la Entrada Mora, que evoca las formaciones morunas del caudillo Al-Azraq que asediaron la Villa.
Los participantes desfilaron desde la zona conocida como el Partidor hasta llegar a la plaza de España, luciendo trajes radiantes y espadas. Luego, continuaron por Sant Llorenç y terminaron al final de la avenida del País Valencià.
Durante el desfile, las miles de personas que llenaban los balcones y las calles pudieron admirar las distintas carrozas, en especial la del capitán, rodeado de sus caballeros, las escuadras especiales, los estandartes y grupos de bailarines. La Entrada Cristiana concluyó con la llegada del Alférez, que cerró el desfile.
Por la tarde, la Entrada Mora comenzó después de una pausa para comer. Este desfile contó con la participación de otras 16 ‘filaes’ y sumergió al público en un ambiente oriental con bailarinas y guerreros africanos, bajo una lluvia de confeti y serpentinas lanzadas desde los balcones.
En cuanto a los líderes de cada desfile, el bando cristiano fue liderado por su capitán, Daniel Cano, de la ‘filà’ Alcodianos. Por su parte, los moros estuvieron dirigidos por su respectivo capitán, Jordi Peidro, de la ‘filà’ Mudéjares. El papel de Sant Jordiet recayó este año en Mauro Abellán.
Una novedad este año fue la participación de agentes a caballo de la Policía Nacional, que desfilaron en conmemoración del 200 aniversario de este cuerpo de seguridad.
Varias autoridades acudieron a la ciudad para disfrutar de las Entradas. Entre ellos se encontraban el alcalde de Alcoy, Toni Francés; la ministra de Ciencia, Innovación y Universidades, Diana Morant; y el ‘president’ de la Generalitat, Carlos Mazón.
El ‘president’ de la Generalitat, Carlos Mazón, expresó su alegría por visitar Alcoy en el día grande de sus fiestas. Destacó que las fiestas de Moros y Cristianos son un ejemplo de la tradición y seña de identidad de la Comunitat Valenciana.
Por su parte, la ministra Diana Morant calificó las celebraciones de Alcoy como una cita obligada para quienes disfrutan de revivir las tradiciones, la cultura y la identidad.
Los festejos de la Trilogía Festera continuaron el domingo con el Día de Sant Jordi, dedicado al patrón de la ciudad, y concluyeron con el Día del Alardo y el Día del Patrón. Durante estos días, la ciudad de Alcoy contó con el dispositivo de seguridad más importante de su historia, con más de 2,600 efectivos para garantizar la seguridad de todos los asistentes. Además, se reforzó el servicio de limpieza y recogida de residuos durante las fiestas.