Cada vez va quedando mucho más claro que a la Reserva Federal (Fed) no le agrada la música que está tocando la economía estadounidense. El presidente de la Fed de Saint Louis, James Bullard, ha reconocido que los últimos datos macro están exponiendo que la economía estadounidense “es mucho más fuerte de lo que pensábamos” y eso debería motivar una posición mucho más rigurosa por la parte del banco central. “La Fed deberá ir alén del 5% para supervisar la inflación”, ha sentenciado.
En una entrevista concedida a ‘CNBC’, el banquero, entre los integrantes mucho más duros de la Fed, aseguró que al banco central le queda “un trecho por recorrer” y solo “debería frenar en el momento en que haya alcanzado la tasa terminal”.
En este sentido, el presidente de la Reserva Federal de Saint Louis indicó que su tasa máxima todavía es del 5,38% (o un rango de 5,25 – 5,5%).
Además, el ‘halcón’ Bullard ha señalado que los mercados “tienen la posibilidad de estar sobrevalorando” el peligro de recesión para la economía estadounidense en 2023. “Pienso que los mercados han sobrestimado una recesión en la segunda mitad de 2022 y sobrestimado una recesión en la primera mitad de 2023 y quizás están sobrevalorando las opciones de una recesión en la segunda mitad de 2023”, ha apuntado.
La previsión del banquero es de un “desarrollo equilibradamente retardado este año con una inflación en descenso”, puesto que “proseguimos en un régimen de bajo desarrollo de la eficacia”.
No obstante, Bullard ha sobre aviso que, de no darse ese ámbito, “va a haber que accionar”. “La Fed precisa ser contundente en este momento y poner la inflación bajo su control este año. El peligro es que la inflación no baje o se reacelere”, ha aseverado.
Estas afirmaciones de Bullard no son las primeras de tono duro que llegan por la parte de integrantes de la Fed en las últimas semanas. En verdad, nuestro Bullard ahora solicitó el pasado enero que la Fed subiese lo antes posible las clases de interés sobre el 5% y últimamente apuntó que apoyaría una subida de 50 puntos básicos en el mes de marzo si pudiese votar en la asamblea del Comité Federal de Mercado Abierto (FOMC, por sus iniciales en inglés) de marzo.
Por su lado, Loretta Mester, presidenta de la Fed de Cleveland, mencionó que veía “razonamientos económicos contundentes” para una subida de 50 puntos básicos en la pasada asamblea de la Fed del 31 de enero y 1 de febrero. Por su parte, Neel Kashkari, presidente de la Fed de Minneapolis y entre los banqueros mucho más duros del organismo, solicitó llevar las clases de interés hasta el 5,4% a principios del mes vigente.
“Contamos trabajo por llevar a cabo. Entendemos que subir las clases puede poner un techo a la inflación. Debemos subir las clases violentamente para poner un techo a la inflación y después dejar que la política monetaria se abra sendero mediante la economía”, señaló Kashkari.
En cambio, la semana pasada, Thomas Barkin, presidente de la Reserva Federal de Richmond, se decantó por sostener las subidas de 25 puntos básicos, al estimar que entrega de determinada “elasticidad” al banco central para investigar la evolución de la economía estadounidense.
Este miércoles se publicarán las actas de la asamblea de febrero de la Fed. Ipek Ozkardeskaya, analista sénior de Swissquote Bank, piensa que el archivo mostrará que “los gobernantes de la Fed están preocupados por la fortaleza del mercado de trabajo y señalarán la resistencia de la economía para proseguir subiendo las clases”.