Ayuso abre el Dos de Mayo al Gobierno de Sánchez, pero sin Bolaños

En el corazón de Madrid, en la emblemática Puerta del Sol, se prepara una vez más la celebración del Dos de Mayo, una efemérides que conmemora la rebelión de los madrileños contra la ocupación francesa en 1808. Sin embargo, el escenario político que rodea a este evento histórico ha creado su propio drama en los últimos años, especialmente en lo que concierne a quién se invita y quién acude.

Alejandra Blázquez, jefa de protocolo de la Comunidad de Madrid, puede esperar un evento menos agitado este mes en comparación con el año pasado. En 2023, las cámaras de televisión captaron a Blázquez mientras se enfrentaba al ministro de la Presidencia, Félix Bolaños, que intentó acceder a la tribuna de honor sin estar invitado. Esta confrontación se convirtió en un hito en la carrera de Blázquez y en un punto de fricción en las relaciones entre la Comunidad de Madrid y el gobierno central.

Este año, el ministro Bolaños no ha sido invitado a la celebración del Dos de Mayo, siguiendo con la tradición de no invitarlo. En cambio, la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, ha extendido invitaciones a dos representantes del Gobierno: Ángel Víctor Torres, ministro de Política Territorial, y Francisco Martín, delegado del Ejecutivo de Pedro Sánchez en Madrid.

Margarita Robles, ministra de Defensa, también ha sido invitada como es costumbre, aunque no podrá asistir este año debido a compromisos previos. La ausencia de Robles podría aliviar parte de la tensión que ha rodeado la celebración en años anteriores, especialmente después del incidente con Bolaños en 2023.

El incidente de Bolaños en el Dos de Mayo de 2023 fue una respuesta a la negativa de Sánchez a asistir a la celebración en 2022, a pesar de haber sido invitado por Ayuso. En su lugar, Sánchez envió a Bolaños como su representante, una decisión que no fue bien recibida por el gobierno de la Comunidad de Madrid. En respuesta, Ayuso decidió no invitar a Sánchez al evento en 2023.

El año pasado, la ministra de Política Territorial, Isabel Rodríguez, también se negó a asistir a la celebración tras ser invitada por Ayuso. En su lugar, Rodríguez envió a Bolaños como su representante, una decisión que fue rechazada por la Comunidad de Madrid. A pesar de esto, Bolaños se presentó en la celebración, lo que llevó al famoso enfrentamiento con Blázquez.

En noviembre de 2023, la relación entre el gobierno de la Comunidad de Madrid y el gobierno central se deterioró aún más cuando Ayuso no fue invitada a la inauguración oficial del AVE Madrid-Asturias. En respuesta, Ayuso anunció que los miembros del gobierno de Sánchez estarían vetados en todos los actos institucionales de la Comunidad de Madrid.

Este año, sin embargo, las tensiones parecen haberse aliviado. Bolaños ha confirmado que tiene otros compromisos para el Dos de Mayo y no planea asistir a la celebración en Madrid. Además, las invitaciones enviadas por Ayuso para el evento de este año parecen indicar una vuelta a la normalidad institucional.

Pero no todos están convencidos de que la situación se haya resuelto completamente. Desde el PSOE de Madrid, han advertido que si Ayuso mantiene su veto contra los ministros de Sánchez, estaría actuando de manera irresponsable. Jesús Celada, portavoz adjunto del PSOE en la Asamblea de Madrid, ha instado a Ayuso a reconocer el apoyo del Gobierno de España a la Comunidad de Madrid y a evitar convertir el Dos de Mayo en un acto separatista.

El Dos de Mayo es un día de celebración para todos los madrileños, independientemente de su afiliación política. Sin embargo, en los últimos años, este evento ha sido testigo de las tensiones y rivalidades políticas que existen entre el gobierno de la Comunidad de Madrid y el gobierno central. A medida que se acerca el Dos de Mayo de este año, solo el tiempo dirá si las viejas heridas se han curado o si la celebración será una vez más escenario de conflictos políticos.