Una científica revisas unas muestras de sangre.

El cáncer colorrectal, conocido como una de las neoplasias más comunes en Occidente y la segunda causa de muerte en la población, podría ser detectado de manera más eficaz y precoz gracias a un simple análisis de sangre. Este tipo de prueba resulta tan sensible como las pruebas de sangre oculta en heces, actualmente empleadas para el rastreo de la enfermedad.

Los médicos creen que la utilización de la biopsia líquida podría aumentar la participación de la población en los cribados de la enfermedad, que hasta la fecha resulta ser baja debido al «estigma» asociado con la manipulación de las heces. La implementación de este tipo de análisis de sangre podría ayudar a eliminar ese obstáculo, permitiendo una mayor participación en los cribados y, por lo tanto, una detección más temprana del cáncer colorrectal.

Un equipo de investigadores del Hospital del Mar de Barcelona ha estado trabajando en la utilización de la biopsia líquida en sangre para la detección de marcadores tumorales de esta enfermedad. Los resultados de su investigación fueron publicados recientemente en la revista ‘Annals of Oncology’ y presentados en el último congreso de la European Society of Medical Oncology (ESMO) celebrado en Madrid.

Xavier Bessa, jefe del Servicio de Aparato Digestivo y coordinador del Grupo de investigación translacional de neoplasias de colon y recto del Mar, explicó que la biopsia líquida se basa en el análisis de sangre para la detección de ADN tumoral circulante. Este tipo de prueba, que se está realizando de forma piloto, ha demostrado tener una sensibilidad de hasta el 90%, muy similar a los cribados de la sangre en heces.

Además, el estudio ha demostrado que la biopsia líquida es capaz de detectar «tumores más precoces». Aunque la sensibilidad era solo del 14% para las situaciones preneoplásicas, como los pólipos de colon y recto, la técnica se mejoró incluyendo el análisis de la proteómica y la sensibilidad aumentó al 23% en los pólipos avanzados.

A pesar de los resultados prometedores, Bessa insistió en que la prueba es «piloto» y aún queda un «recorrido muy grande» hasta verla implementada en los hospitales. No obstante, la biopsia líquida abre un camino hacia la detección más temprana y eficaz del cáncer colorrectal.

El estudio analizó 623 muestras de sangre, 318 de las cuales eran de personas que se sometieron a una colonoscopia en el Hospital del Mar después de que la prueba de sangre oculta en heces diera positivo. El resto eran personas a las que se les había detectado un cáncer de colon.

El test busca ADN procedente del tumor en el colon, utilizando diferentes estrategias simultáneamente: analiza la presencia de mutaciones del ADN, metilaciones, así como fragmentómica, es decir, alteraciones relacionadas con el tumor. «El análisis de múltiples marcadores permite incrementar la sensibilidad en la detección del ADN tumoral circulante, que en los estadios más iniciales del tumor puede estar muy poco presente en las muestras de sangre», comenta Beatriz Bellosillo, jefe de sección de Diagnóstico Molecular del Servicio de Anatomía Patológica.

Esta notable investigación subraya la importancia de la innovación en el campo del diagnóstico médico, y cómo los avances en la biopsia líquida podrían tener un impacto significativo en la detección y el tratamiento del cáncer colorrectal en el futuro.