Chinches: 5 plantas aromáticas para acabar con ellos

El creciente problema de las chinches en España y el cambio climático

Las chinches, pequeños insectos que se alimentan de sangre, están invadiendo cada vez más los espacios en España. El cambio climático se señala como uno de los culpables, ya que el aumento de las temperaturas permite que estos insectos proliferen durante más tiempo, ya que el frío los mata.

Así lo apunta la doctora Patricia Guillem, catedrática de Epidemiología, Salud Pública y Medicina Preventiva de la Universidad Europea. Según ella, «los chinches, como muchos otros insectos, disminuyen su actividad cuando llega el frío. Debido al cambio climático, el hecho de que en octubre continúen las altas temperaturas, favorece que sigan reproduciéndose».

Los datos del Ministerio de Sanidad son alarmantes: la presencia de chinches aumentó un 70% entre 2019 y 2020. Y las cifras más recientes de las empresas de control de plagas indican que entre enero y septiembre de este año, el aumento ha sido del 71% en comparación con el mismo periodo del año anterior.

Existen muchas variedades de chinches, aunque los más habituales y molestos son los llamados chinches de cama (cimex lectularius), que suelen aparecer en horario nocturno y pican a las personas, atraídas por su calor y aroma corporal y por el dióxido de carbono que se libera al respirar.

Plantas contra los chinches

Afortunadamente, al igual que ocurre con otros insectos chupadores de sangre, existen ciertas plantas que pueden ayudar a combatirlos. Hay cinco plantas naturales con propiedades repelentes y asesinas de chinches altamente efectivas. Estos hallazgos prometen ofrecer un enfoque ecológico y seguro para combatir las crecientes infestaciones y plagas de chinches en hogares y hoteles.

Un equipo de investigación ha identificado cinco plantas comunes que contienen compuestos naturales capaces de repeler o incluso matar a las infestaciones de chinches sin el uso de insecticidas y otros productos químicos dañinos para animales y plantas.

La primera de estas plantas es la lavanda, cuya fragancia distintiva se ha demostrado que repele de manera efectiva los chinches. Evita que infesten áreas tratadas con aceite esencial de lavanda.

La segunda planta es la menta, que al igual que la lavanda, es eficaz para mantener a los chinches a raya gracias a sus compuestos repelentes.

El eucalipto, originario de Australia, es la tercera planta. Su fuerte aroma es conocido por su capacidad para repeler insectos, incluyendo los chinches.

La cuarta planta es la cúrcuma, conocida por su uso en la cocina como especia y como componente en la medicina tradicional, pero también es un repelente natural eficaz para chinches y otros insectos.

Por último, la ruda, una planta perenne que crece de forma natural en el sur de Europa y en regiones del norte de África, es eficaz para ahuyentar a los chinches debido a su olor fuerte y desagradable.

Estos hallazgos presentan una alternativa natural y ecológica para enfrentar la creciente problemática de las chinches en España. Sin embargo, la lucha contra estas plagas debe ser acompañada por un esfuerzo colectivo para afrontar el cambio climático, responsable en parte de su proliferación.