Prepárate para la ola de calor en Córdoba: se esperan 41 grados

El clima en Córdoba: Desaparece la probabilidad de lluvias y se alistan las noches sofocantes

El inicio de junio en Córdoba ha sido atípico, caracterizado por temperaturas agradables y algunas precipitaciones. Sin embargo, este escenario está llegando a su fin. Según la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), se espera una subida paulatina de las temperaturas a partir de la próxima semana. Los termómetros podrían llegar a superar los 40 grados de máximas, anunciando la llegada de un verano sofocante.

La Aemet, en su sitio web, ha pronosticado un tiempo estable para la próxima semana, sin rastro alguno de lluvia y ni una sola nube. Este pronóstico indica que las noches comenzarán a ser más calurosas, lo que puede afectar la salud y bienestar de los habitantes de Córdoba.

Previsiones de temperatura para la semana próxima

Según las previsiones de la Aemet, las temperaturas para los próximos días (hasta el sábado) serán las siguientes:

El lunes se esperan máximas de 33° y mínimas de 16°. El martes, las temperaturas oscilarán entre los 37° de máxima y 18° de mínima. El miércoles, las temperaturas máximas alcanzarán los 39° y las mínimas serán de 20°.

El jueves y el viernes serán los días más calurosos de la semana, con máximas de 41° y mínimas de 20° y 21° respectivamente. Por último, el sábado, se espera una ligera bajada de las temperaturas, con máximas de 38° y mínimas de 21°.

Es importante destacar que estas previsiones podrían variar, ya que la fiabilidad del modelo predictivo puede no ser exacta con tantos días de antelación.

Este cambio en las condiciones climatológicas puede tener un impacto significativo en la calidad de vida de las personas. Las altas temperaturas, especialmente durante la noche, pueden causar insomnio, desgaste físico y estrés térmico.

Además, el calor intenso puede aumentar el riesgo de deshidratación y golpe de calor, especialmente en personas mayores, niños y personas con enfermedades crónicas. Por ello, es crucial tomar medidas preventivas como mantenerse hidratado, evitar la exposición directa al sol en las horas pico y usar ropa ligera y de colores claros.

La falta de lluvias también puede tener consecuencias en el medio ambiente. Las altas temperaturas y la ausencia de precipitaciones pueden favorecer la aparición de incendios forestales.

Además, estos factores pueden afectar a la agricultura, ya que la falta de agua y las altas temperaturas pueden dañar los cultivos y reducir la producción.

En conclusión, es importante estar preparados para este cambio en el clima y tomar las medidas necesarias para proteger nuestra salud y bienestar. También es crucial estar conscientes del impacto que este tipo de fenómenos puede tener en nuestro entorno y en las actividades económicas de la región.