La economía de la región euro da la sorpresa y se dirige a eludir la recesión. El Producto Interior Salvaje (PIB) registró en 2022 un desarrollo del 3,5%, según los datos preliminares publicados por Eurostat, la oficina de estadística social, al paso que en el cuarto período de tres meses del año la economía de la zona se expandió un 0,1%.
En toda la Unión Europea (UE), el PIB cerró el año con un avance del 3,6%, tras atascarse en el último período de tres meses. Hay que rememorar que en el último trimestre de 2022, la economía había crecido un 0,3% tanto en la región euro como en la UE.
Entre los Estados integrantes para los que se tiene datos que corresponden al cuarto período de tres meses, Irlanda (+3,5%) registró el mayor incremento en comparación con el período de tres meses previo, seguido de Letonia (+0,3%), España y Portugal (los dos +0,2%). Por contra, los mayores descensos tuvieron sitio en Lituania (-1,7%), Austria (-0,7%) y Suecia (-0,6%).
«El informe adelantado sobre el PIB de la región euro exhibe que el desarrollo económico volvió a ralentizarse en el cuarto período de tres meses, pero no cayó en picado, lo que contraría el mensaje de las investigaciones», dicen los investigadores de Pantheon Macroeconomics, que apuntan que, si bien el comunicado de Eurostat no tiene dentro datos, «sospechamos que el lastre de la demanda interna se vio compensado por una contribución efectiva del comercio neto».
De cara al primer período de tres meses de 2023, piensan que el PIB de la región euro va a caer, «puesto que la subida de los modelos de interés y el endurecimiento de los criterios de concesión de préstamos desincentivan la inversión, al tiempo que la inflación, aún elevada, sostiene bajo control el gasto de los hogares, contrarrestando cualquier impulso continuado del comercio neto».
De este modo, aguardan una caída intertrimestral del PIB del 0,2% entre enero y marzo. Y matizan: «Las revisiones son siempre y en todo momento probables, pero, si nos encontramos en la verdad al aguardar una caída del PIB en el primer período de tres meses, tomar los datos de el día de hoy literalmente quiere decir que la región euro probablemente evitó ingresar en una recesión técnica este período de tres meses. Esto envalentonará al Banco Central Europeo (BCE), que proseguirá endureciendo su política monetaria para combatir contra la inflación».
Por su lado, en Oxford Economics resaltan que «la economía de la eurozona evitó una contracción en el cuarto período de tres meses de 2022, pero el desarrollo prosiguió siendo muy enclenque» y piensan que probablemente el desarrollo de forma anual lo continúe siendo. «Si bien la inflación reduzca, los capital reales van a tardar en volver como estaba de forma plena. El encontronazo del endurecimiento de la política monetaria del BCE asimismo proseguirá repercutiendo en la economía real. Más allá del novedoso cambio positivo de los datos de las investigaciones, no es muy probable que esto se traduzca en un sólido accionar del PIB de la región euro», agregan.
«Es fabuloso ver que el PIB de la región euro fué mejor de lo que se espera. Es un logro dados los visibles vientos en contra a los que se encara la zona«, aseguran en Titan Asset Management, donde consideran que «esto incrementa las posibilidades de que el BCE prosiga adelante con su período de subidas de tipos sosprechado, lo que quiere decir que la zona aún no está fuera de riesgo al empezar lo que probablemente va a ser un difícil 2023».