Apple, la mundialmente reconocida compañía de tecnología, ha sido golpeada con una demanda que podría tener implicaciones significativas para su futuro. El Departamento de Justicia de Estados Unidos ha lanzado una acusación de peso contra el gigante tecnológico, alegando que ha establecido un monopolio ilegal en el sector de los teléfonos inteligentes, perjudicando la competencia, limitando la innovación y resultando en precios más altos para los consumidores.
La demanda sostiene que Apple, la compañía detrás del icónico iPhone, ha utilizado su control dominante sobre el mercado de los smartphones para llevar a cabo lo que describe como una «amplia, sostenida e ilegal» conducta de control abusivo del mercado. En el corazón de esta acusación está el «jardín amurallado» de Apple, un ecosistema digital construido alrededor de su teléfono móvil insignia y otros productos populares como el iPad, el Mac y el Apple Watch. Estos productos están diseñados para interconectarse bajo un mismo sistema operativo, creando un ecosistema cerrado que, según la demanda, excluye a la competencia.
Este modelo ha sido fundamental para posicionar a Apple como una de las compañías más prósperas del mundo, generando unos ingresos anuales de casi 400.000 millones de dólares y un valor de mercado de casi 2,7 billones de dólares. Microsoft es la única empresa que la supera, con una capitalización bursátil que supera los 3 billones de dólares gracias a su exitosa incursión en la inteligencia artificial junto a OpenAI, creadora de ChatGPT.
Sin embargo, los reguladores antimonopolio ven el «jardín amurallado» de Apple como una arma en su arsenal para intimidar a la competencia y frenar la innovación de posibles rivales. Según ellos, este dominio del mercado le permite a Apple cobrar precios más altos a los consumidores. Apple, por su parte, defiende su modelo, argumentando que es esencial para garantizar una mayor protección de la información personal de sus usuarios.
El fiscal general Merrick Garland se pronunció sobre el caso, argumentando que «los consumidores no deberían tener que pagar precios más altos porque las empresas violan las leyes antimonopolio». Garland sostiene que Apple no solo ha mantenido su posición dominante por mérito propio, sino a través de la violación de la ley federal antimonopolio.
La demanda contra Apple fue presentada ante un tribunal federal de Nueva Jersey, así como ante un total de 16 fiscales generales estatales en los EEUU. Este caso se enmarca en un contexto de creciente presión por parte de Washington para hacer cumplir la ley antimonopolio federal, destinada a poner fin a la concentración de poder de las grandes empresas, prevenir los abusos anticompetitivos y garantizar un mercado justo. El presidente estadounidense, Joe Biden, ha instado al Departamento de Justicia y a la Comisión Federal de Comercio a aplicar vigorosamente esta normativa.
La noticia de la demanda ha golpeado el valor de Apple en los mercados financieros. Al momento de la publicación de esta noticia, las acciones de la compañía dirigida por Tim Cook habían caído un 3,65%. Sumándose a esto, empresas como Meta, Microsoft y X/Twitter se unieron el miércoles a otra demanda antimonopolio contra Apple, esta vez interpuesta por el desarrollador de videojuegos Epic Games.