El Gobierno español busca convertirse en el tercer país de la Unión Europea con una jornada laboral legalmente inferior a las 40 horas semanales
El gobierno español tiene grandes planes para el futuro del trabajo en su país. Con la ambición de convertir a España en el tercer país de la Unión Europea con una jornada laboral por ley inferior a las 40 horas semanales, se ha convocado a sindicatos y patronales para tratar de alcanzar un acuerdo para esta nueva normativa.
La mayoría de los países miembros de la Unión Europea ya tienen una jornada laboral que se encuentra por debajo de este tope, aunque sólo dos han establecido explícitamente en su legislación una jornada máxima inferior a las 40 horas. No obstante, el Ministerio de Trabajo español tiene la esperanza de sumarse a este selecto grupo.
La vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz, está en plenas negociaciones con los sindicatos y patronales para presentar al Congreso una norma que reduzca el tiempo máximo de la jornada laboral. Si se aprueba, esta norma entraría en vigor el 1 de enero del 2025, y establecería una jornada laboral de 37,5 horas semanales.
¿Quiénes se beneficiarán más de esta reforma?
Aunque el impacto de esta reforma sería general, un informe publicado por la Fundación de Estudios de Economía Aplicada (Fedea) señala que los hombres podrían beneficiarse más que las mujeres. Esto se debe a que los sectores más masculinizados, como la construcción, la industria y la agricultura, suelen tener las jornadas más largas.
La jornada laboral en España se ha regulado por ley a un máximo de 40 horas semanales desde los años 80. No obstante, las horas trabajadas por semana no han permanecido constantes durante este tiempo. Según los datos de la Encuesta de Población Activa (EPA) citados por Fedea, la jornada laboral media en España ha disminuido de 41,5 horas en 1987 a las actuales 37,6 horas, situándose ligeramente por encima de la media de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE).
Actualmente, sólo Francia y Bélgica tienen una jornada laboral máxima legislada de menos de 40 horas, con 35 horas y 38 horas, respectivamente. Con la propuesta del Ministerio de Trabajo de establecer una jornada laboral de 37,5 horas a partir del 2025, España se situaría como el segundo país de la UE con la jornada laboral más baja, adelantando a Bélgica.
Es importante notar que estos máximos legales no suelen corresponderse con las horas de trabajo reales, que suelen ser inferiores. Por ejemplo, en Italia el límite legal es de 40 horas, pero los convenios colectivos establecen una jornada media de 38 horas. Otros países, como Alemania y Dinamarca, no tienen un límite legal, pero sus jornadas laborales son inferiores a las 40 horas, con 38,2 y 37 horas, respectivamente.
El informe de Fedea también señala que en Francia, a pesar de que la jornada laboral máxima es de 35 horas, existen incentivos flexibles que elevan la jornada laboral media a 35,6 horas.
Fedea, entidad patrocinada por importantes empresas españolas como CaixaBank, Santander, BBVA, Abertis, Mapfre o ACS, defiende que la jornada laboral debería reducirse mediante un acuerdo entre sindicatos y patronales, sin intervención del Gobierno. Según este organismo, una intervención directa de la Ley podría interferir en la tendencia gradual de reducción de la jornada laboral y tener un impacto negativo en sectores donde la productividad está directamente relacionada con el tiempo de trabajo.