El Gobierno de Aragón y Vox negocian con el Partido Popular para frenar la inmigración ilegal

El Gobierno de Aragón, liderado por el vicepresidente primero y líder autonómico de Vox, Alejandro Nolasco, ha iniciado conversaciones con el Partido Popular. El objetivo de estas conversaciones es, según el líder de Vox, «no facilitar la entrada de ningún inmigrante ilegal más en la región».

La noticia surge en el contexto de la acogida de 183 inmigrantes ilegales en el albergue de Pirenarium, en Sabiñánigo, Huesca. Esta acogida fue una decisión del Gobierno de Pedro Sánchez, que trasladó a los inmigrantes desde Canarias siguiendo una petición del Ministerio de Inclusión Social, Seguridad Social y Migraciones.

Los inmigrantes, a su llegada, anunciaron la posibilidad de iniciar una huelga de hambre para exigir mejoras en sus condiciones e incrementar sus oportunidades de encontrar un puesto de trabajo. Esta situación ha generado un fuerte debate sobre la política de inmigración en España, y concretamente en Aragón, donde el gobierno regional busca fórmulas para abordar la situación.

Controversia sobre las promesas a los inmigrantes

Nolasco ha pedido al subdelegado del Gobierno en Huesca, José Carlos Campo, que haga público «qué les ha prometido a los 183 inmigrantes ilegales chantajistas que estaban en huelga de hambre a la que pusieron fin tras reunirse con él».

El vicepresidente de Aragón ha mostrado su desconcierto sobre las supuestas promesas hechas a estos inmigrantes, señalando que «Ellos decían que querían más arroz, pollo y cuscús».

Nolasco ha calificado como «indignante» que «al trabajador que se levanta a las seis de la mañana para llevar a sus hijos al colegio no se le perdona ni una multa de tráfico», mientras que, a su juicio, «el Gobierno de España cede a las pretensiones de personas que entran ilegalmente en el país».

El líder de Vox en Aragón ha criticado al Partido Popular por lo que considera una «irresponsabilidad gravísima» al «regularizar de manera inmediata a 500.000 inmigrantes ilegales«. «Estamos hablando con [el PP] sobre cómo hacerlo. Por ahí no vamos a pasar y se entiende en toda la extensión de la frase», ha insistido.

Además, Nolasco ha mencionado que ha tenido conversaciones con varias de las trabajadoras del albergue, quienes le han transmitido que están viviendo un «infierno personal» debido a las continuas faltas de respeto. En respuesta a esta situación, Nolasco ha reiterado que «no se va a facilitar la entrada de ningún inmigrante ilegal en Aragón».

Esta postura del gobierno regional de Aragón, con Vox a la cabeza, marca una línea dura respecto a la inmigración ilegal. En un contexto de creciente llegada de inmigrantes a las costas españolas, la política de inmigración se convierte en un asunto de creciente importancia y controversia a nivel regional y nacional.